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5 equipos a seguir en la temporada 2021-2022 con un ojo en el futuro

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Pelicans Grizzlies Spurs

Hay muchos atractivos distintos para seguir cada temporada de la NBA. Pueden contarse decenas y decenas de categorías de interés. Y uno de ellos es seguir la evolución de los equipos que, con jóvenes y sin súperestrellas, son competitivos con el material suficiente para dar un paso adelante. No con lo suficiente para ser candidatos al título, pero si para dar pelea partido a partido a la vez que sus jugadores se van imponiendo en la liga y que sus proyectos, un poco más o menos nuevos y un poco también buscando su norte, se afirman como opción correcta para ser luego esos candidatos.

Varios equipos pueden caber en ese lote en la temporada 2021-2022, pero no los Brooklyn Nets o Los Angeles Lakers de las grandes figuras All-NBA o los Houston Rockets, Orlando Magic y Detroit Pistons que recién comienzan su reconstrucción y dan mucho espacio para los novatos. En cambio si los que tienen a los jugadores que van empezando a tomar relevancia y de los cuales puede esperarse una mejora.

Charlotte Hornets en el Este y Memphis Grizzlies, San Antonio Spurs, New Orleans Pelicans y Sacramento Kings en el Oeste forman parte de ese último lote: con más o menos cambios esperan progresar tras una temporada 2020-2021 en la que quedaron en zona de play-in o muy cerca de ella. Ahora su objetivo no cambia demasiado y es momento de repasar que es lo que presentarán a partir del mes de octubre, poniendo foco en los motivos por los que seguirlos noche a noche es una opción interesante pero de resultado incierto.

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Charlotte Hornets fue una revelación en la temporada 2020-2021: ganó un 10% más de partidos que en la campaña anterior, llegó al play-in del Este quedando cerca del 50% de victorias y, lo más importante, logró todo eso a pesar de contratiempos como las lesiones de Gordon Hayward, Devonte' Graham, Cody Zeller y LaMelo Ball que marginaron entre 15 y 28 partidos a cada uno de ellos, pilares de un equipo con un plantel muy corto. Además se afirmaron como uno de los equipos más entretenidos para seguir por League Pass, con una producción constante de highlights encabezada por el tándem Ball-Miles Bridges.

lamelo ball

Graham y sus triples se marcharon y también lo hizo Zeller. A cambio llegaron Mason Plumlee, pivot de características similares a Cody, otro alero rachero y de gran capacidad atlética como Kelly Oubre Jr. y un base experimentado como Ish Smith. Los movimientos en el mercado no deberían cambiar tanto su destino como la capacidad de Hayward (19,6 puntos, 5,9 rebotes y 4,1 asistencias de media con 41,5% en triples en una buena campaña que pasó por debajo del radar) de mantenerse sano y la de Ball de mantener el nivel que tuvo a partir de febrero (18,1 puntos, 5,9 rebotes y 6,2 asistencias de media) que lo terminó haciendo poseedor del premio al rookie del año. Sin Graham en el equipo, habrá más espacio para ellos dos y para Terry Rozier. A su vez tuvieron cierto progreso defensivo en la campaña pasada y es ahí donde tienen que dar el paso adelante como equipo. Los rookies James Bouknight y Kai Jones prometen otra cuota más de espectacularidad. Clasificar a Playoffs no es una obligación, estar en la discusión sí.

Para Memphis Grizzlies la vara puede quedar un poco más alta después de haber llegado a la última postemporada y de haber quedado en las puertas en 2020. El equipo de Tennessee casi que no conoció lo que fue la reconstrucción entre la era del Grit & Grind, que este año comenzará a homenajear con el retiro de las camisetas de Tony Allen y Zach Randolph, y la de Ja Morant, un base que siempre hace que valga la pena sentarse frente a la pantalla.

La última temporada de Morant puede haber dejado un poco de sensación de que la evolución tras ser el rookie del año no fue la esperada, pero en los Playoffs se encargó de borrar eso promediando 30,2 puntos y 8,2 asistencias ante Utah Jazz con dobles-dobles y un partido espectacular de 47 puntos. ¿Faltó apoyo a Morant en la construcción del plantel? Fue un año complicado con Jaren Jackson Jr., su gran ladero de la 2019-2020, lesionado, pero ahora parece que se puede confiar en un retorno al 100% del jugador elegido con el pick 4 del Draft 2018 que recién cumple 22 años. Por ellos dos pasa un 70% del éxito que puedan tener los Grizzlies con este armado.

En la pintura no estará Jonas Valanciunas después de la mejor temporada de su carrera sino que ahora el rol de enforcer será para Steven Adams. Desmond Bane, Brandon Clarke, Dillon Brooks, Kyle Anderson y Tyus Jones conforman un núcleo de jugadores con irregularidad que no parece que puedan ser más que cumplidores en su rol, pero que sirven para ganar en varias noches: Xavier Tillman y el recién llegado Jarrett Culver tendrán que demostrar que pertenecen a ese lote, como también los rookies Santi Aldama y Ziarie Williams, jóvenes de 20 años que en la Summer League parecieron un poco verdes.

San Antonio Spurs vio su temporada 2020-2021 finalizar al caer con Memphis en la primera instancia del play-in. Lo que terminó no fue solamente ese curso sino que se terminó de apagar una era: LaMarcus Aldridge ya se había ido unos meses antes y DeMar DeRozan, Patty Mills y Rudy Gay lo hicieron en la agencia libre. Al fallar por segundo año consecutivo en su intento de llegar a Playoffs (de nuevo por muy poco), en San Antonio pasaron página y le entregaron el control total a sus jóvenes: Dejounte Murray y Derrick White, que promediaron 15 puntos por partido en la temporada pasada, ahora no tienen a los principales responsables de la ofensiva de la primera y segunda unidad a su lado y el mandato es para ellos. Es una incógnita la respuesta que darán.

Dejounte Murray

Los únicos jugadores del plantel mayores de 30 años son Al-Farouq Aminu y Thaddeus Young, dos que parecen tener pocos meses por delante en San Antonio. Las apuestas de la Agencia Libre fueron Doug McDermott y la recuperación a largo plazo de Zach Collins: que el campeón olímpico Keldon Johnson, ya afirmado como titular durante la campaña pasada, o Devin Vassell, quien podría ser titular por su aporte defensivo, continúen impulsando su producción parece algo más confiable de parte de un equipo que volverá a tener a Gregg Popovich como entrenador y para el que los Playoffs suenan como utopía, pero no así competir: tienen las piezas necesarias para conformar una de las mejores defensas de la Conferencia Oeste (y también les falta cualquier cosa similar a una estrella ofensiva).

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Si del poder de las estrellas se trata, New Orleans Pelicans cuenta con Zion Williamson: en su primer año como All-Star el ex jugador de Duke terminó promediando 28,8 puntos, 7,3 rebotes y 4,1 asistencias desde el mes de marzo en adelante. Poco hay para decir sobre él que no se haya dicho: todavía tiene mucho camino para evolucionar (principalmente en su aporte defensivo como en su mano para lanzar tiros libres) y aun así ya pelea por un lugar entre los 25 mejores jugadores de la NBA. Lo único que le falta para que eso no se pueda refutar es ganar más partidos. Además le da a los Pelicans algo que también tienen Hornets y Grizzlies con Ball y Morant: jugadas espectaculares.

zion williamson

Lo que no tiene Pelicans es un proyecto bien definido. O eso parece. Stan Van Gundy duró apenas una temporada como entrenador y se marchó luego de no encontrarle la vuelta a la defensa del equipo, una defensa que permitió 115 puntos por partido y los llevó a perder 41 partidos. En búsqueda de ese norte se integró Willie Green como nuevo head coach en su primera experiencia en el cargo tras haber sido asistente en equipos campeones de Golden State Warriors y en los Phoenix Suns finalistas. Brandon Ingram continua después de una temporada no muy distinta a la que lo tuvo como All-Star, pero hay más cambios fuertes: no están más Steven Adams ni Lonzo Ball, con los europeos Jonas Valanciunas y Tomas Satoransky ocupando sus lugares. Y así como Devonte' Graham llega para dar una mano con sus triples, Nickeil Alexander-Walker (promedio de 19 puntos y 3 asistencias por encuentro cuando fue titular) parece tener bastante más para dar en la media cancha.

Sacramento Kings va una vez más por el intento de clasificar a Playoffs, algo que sucedió por última vez cuando, por ejemplo, YouTube recién comenzaba a ser popular en todo el mundo: en el primer semestre de 2006. Verlos intentar consumar eso parece suficiente para estar atento con el desarrollo de la temporada 2021-2022 de los Kings, pero hay más motivos. Su proyecto parece estar perdiendo paciencia: Luke Walton ya va por su tercera temporada como head coach y Monte McNair recién por la segunda como GM, pero cada año en Sacramento parece contar por tres con tanta sequía en los últimos tiempos. Por eso no extrañaría que estemos o ante su primer capítulo de éxito o, más probablemente, ante un evento que lo sacuda y cambie algunas caras.

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Lo dura que es la Conferencia Oeste (los ocho equipos que más partidos ganaron en la Fase Regular 2020-2021 son candidatos a repetirse) complica ese proceso, pero no todo es resultados en Sacramento para un fanático imparcial de la NBA. De'Aaron Fox, Tyrese Haliburton y Davion Mitchell pueden conformar una de las mejores media canchas sub 23 de la liga y a su vez está el caso Marvin Bagley, esa elección de Draft que será eternamente criticada por ser previa a la de Luka Doncic y Trae Young: el alero comenzó de forma aceptable en la liga y pertenece a la NBA, pero durante los dos años con Walton no enseñó una evolución sostenida. También en una noche cualquiera Buddy Hield puede tomar ritmo atrás de la línea de tres puntos y darle a Sacramento un triunfo impensado. Con todo eso deberán intentar construir una plataforma que al menos los lleve al play-in: no deben aceptar otra cosa esta vez.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Agustín Aboy Photo

Agustín es productor de contenidos para Sporting News.