Boston Celtics y la conducción en manos de Dennis Schroder

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Dennis schroder

Los Boston Celtics vienen de una 2020-2021 decepcionante desde varios aspectos, que acabó en una rápida y lógica despedida en 1° Ronda, cayendo ante los Brooklyn Nets por 4-1. La histórica franquicia de Massachussetts parece haber sentido ese golpe y para la próxima temporada tendrá una imagen renovada, con nuevas caras en la dirigencia (Brad Stevens por Danny Ainge), en el banco (Ime Udoka por Brad Stevens) y también dentro del campo de juego.

Entre esas novedades en lo que respecta al plantel, el cambio en la base probablemente se trate del movimiento más relevante: afuera Kemba Walker y adentro un Dennis Schroder que llega tras un año irregular en los archirivales Lakers. Las preguntas que surgen entonces son, ¿cuán diferente lucirá el equipo con ese nuevo conductor y cómo puede impactar a las debilidades que viene de mostrar el esquema de Boston?

Lo primero a considerar y entender pasa por puntualizar una de las falencias más grandes de los Celtics en la pasada campaña: la falta de movimiento de balón y el abuso del juego individual. De hecho, las 41,4 asistencias potenciales (pases que derivaron en un lanzamiento) que registraron en el certamen fueron la tercera peor marca de toda la competencia, solo por delante de New York (39,4) y Portland (39,3). 28° entre 30 equipos.

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Aunque esa marca contrasta con lo que alguna vez se consideró como el sello de los equipos de Brad Stevens, la misma no sorprende demasiado teniendo en cuenta los nombres principales del equipo: Jayson Tatum tiene un talento anotador enorme, pero está claro que no destaca a la hora de generar juego para sus compañeros. Lo mismo sucede con Jaylen Brown y Kemba Walker, mientras que haber perdido a Marcus Smart durante un tercio de la campaña tampoco ayudó en lo más mínimo.

Boston apostó en la 2020-2021 a explotar ventajas y a intentar aprovechar al máximo el talento anotador de sus piezas: acabaron en el Top 10 tanto en intentos desde aclarados (8°) como desde disparados tomados tras cortina directa (10°). Pero en contraste, apenas aparecieron 21° en descargas a los cortinadores desde el pick and roll y 22° en intentos a pie firme, jugadas en las que se necesita un mayor movimiento de balón.

Con Tatum nuevamente como foco de la ofensiva, probablemente no veamos a los Cetlics transformarse en los Spurs del 2014 de la noche a la mañana. Pero ¿puede Schroder generar un cambio positivo en relación a lo que daba Walker en el área de generación de juego? La sensación es que sí. Y es que aún jugando en un equipo con otros grandes pasadores como LeBron James o Marc Gasol, el alemán tuvo un rendimiento bastante superior al hoy base de los Knicks como asistidor: promedió 12,3 asistencias potenciales por cada 36 minutos en cancha, contra 9,7 de Kemba. Además, mientras Walker dio 3,3 pases por cada disparo al aro, Schroder llevó ese número a 4,7.

Sin ser Steve Nash o Jason Kidd, queda claro que Schroder es una mejoría en relación a Kemba, al menos en lo que respecta a la predisposición para mover la bola y asistir a sus compañeros.

Aunque claro, el nuevo conductor no es la única señal positiva para Boston, sino que además han sumado a Al Horford, un pivote de enorme valía como pasador, mientras que también esperan disponer de Marcus Smart más de lo que lo hicieron en la 2020-2021 (solo jugó 48 partidos). Por otro lado, tendremos que descubrir exactamente cuál es la propuesta ofensiva de Udoka y si pone hincapié en mejorar esa falta de conexión entre sus atacantes.

En ese sentido, los antecedentes de Udoka parecen ser un punto muy a favor: jugó tres años bajo el comando de Gregg Popovich en los Spurs y luego lo acompañó en el cuerpo técnico durante siete temporadas. Además trabajó como asistente de otro ex San Antonio como Brett Brown en Philadelphia y viene de formar parte del staff de Steve Nash en Brooklyn. Digamos que nadie deberá enseñarle la importancia que tiene el movimiento de balón y el juego en equipo para el éxito de un conjunto NBA.

"Queremos tener un equipo bien balanceado. Mirando los números generales, y perdón que diga esto Brad, pero terminaron 27° en asistencias el año pasado", mencionó Udoka durante su conferencia de prensa de presentación junto a Stevens. "Queremos tener más baloncesto de equipo. Aunque al mismo tiempo tienes que entender lo que tu personal te indica y eso es Jayson, Jaylen y gente que busca anotar con el balón en un nivel de élite. Hay que jugar con tus fortalezas".

¿Veremos un Boston distinto en la 2021-2022, recuperando ese juego colectivo que normalmente supo distinguir a la franquicia durante sus mejores años? Los nombres apuntan a una mejoría, pero ya llegará el tiempo de demostrarlo en el campo de juego.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.