Brooklyn Nets se llevó otro thriller en la prórroga ante Atlanta Hawks de la mano de Harden y Durant

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Esto de jugar partidos apretados parece haberse vuelto la norma para los Brooklyn Nets, quienes este miércoles protagonizaron su tercer encuentro de suplementario de la 2020-2021 y tuvieron su sexto partido definido por cuatro puntos o menos. Sin embargo, a diferencia de las prórrogas anteriores donde habían caído ante Memphis y Cleveland, esta vez pudieron salir a flote: se impusieron a los Atlanta Hawks por 132-128.

Luego de que James Harden no pudiera anotar en el cierre del cuarto período, dejando el marcador igualado en 116, el partido llegaría a un suplementario donde los Nets serían superiores: hubo nueve puntos rápidos combinados entre Kyrie Irving y Jeff Green, acompañados luego de una volcada de Kevin Durant par ponerse 127-121 arriba, restando 2:46.

Los Hawks lograron ponerle más suspenso a la definición e incluso tuvieron una oportunidad de empatar la historia con un triple de De'Andre Hunter que no ingresó. Brooklyn se quedó con el rebote y entre Harden y Durant sentenciaron la historia desde la línea de libres. 

Comandado por su Big 3, Brooklyn estuvo cómodo ofensivamente durante toda la noche, terminando con un 53% de campo frente a unos Hawks que entraron al partido con la séptima mejor defensa de la liga. Durant terminó con 32 puntos, Harden fue la figura con 31 más 15 asistencias y 8 rebotes, mientras que Irving sumó 26 unidades. Fue la primera ocasión desde que juegan juntos (cuarto partido) en la que las tres superan los 25 tantos.

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Por su lado, también fue decisivo el aporte de dos suplentes: Bruce Brown (12 puntos) y Jeff Green (11 puntos y 7 rebotes). El primero consiguió nada menos que 10 puntos con un 4-4 de cancha en el último cuarto, mientras que el ex Houston no se quedó atrás: 9 tantos entre el cuarto período y la prórroga, mostrando una excelente química con Harden para jugar el pick and roll (algo que ya tuvieron en la temporada pasada en Houston).

A esta altura queda claro que sacando algún caso especial, Brooklyn piensa su formación de cierre con Green como pivot, por lo que tener al veterano en un buen nivel es fundamental. De hecho, DeAndre Jordan no vio ni un segundo de acción entre el último cuarto y el tiempo extra, aún cuando había tenido un partido correcto (11 puntos, 7 rebotes, 3 tapones y 5-5 de cancha en 22 minutos).

Un dato alentador para Brooklyn: a pesar de sus limitaciones en el juego interior, solo perdieron la batalla rebotera por uno (37-36), mientras que dominaron el apartado de puntos en la pintura por 74 a 58. Esta vez Clint Capela no fue factor en Atlanta: 9 puntos y 11 rebotes en 30 minutos, con un flojo 4-10 de cancha.

El que tampoco tuvo la mejor noche en los Hawks fue Trae Young. Porque si bien terminó con 28 puntos y 14 asistencias, lo hizo estando ciertamente errático con el aro: 7-22 de cancha, cubierto por su habitual eficacia desde la línea de libres (11-12). 

Un Young más consistente probablemente le hubiera permitido a Atlanta dar la sorpresa. Especialmente por que sí encontraron buenas tareas en tres otros referentes: Cam Reddish sumó 24 puntos desde la segunda unidad, mientras que De'Andre Hunter y John Collins anotaron 21 cada uno, combinándose para un 16-26 de campo.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

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Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.