Portland Trail Blazers continúa cuesta abajo y sin frenos. Entre las lesiones y los problemas generados tras la confección de la plantilla en verano, los de Oregón tienen varios agujeros importantes en su equipo. Algunos de un tamaño como no se veían desde hace años en Portland.
Ante los Cleveland Cavaliers, los Blazers comenzaron por delante pero no supieron ganar el partido. Las ausencias en la plantilla, las carencias interiores y el mal acierto en el tiro (44%) condenaron a Portland en un partido que debieron llevarse.
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Damian Lillard regresaba de su lesión y era la primera noche que coincidía con Carmelo Anthony. Lillard estuvo desacertado y desde antes del encuentro la prensa especializada comentaba esos problemas en la espalda que podían frenarle. Esos 23 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias se ven maquillados por su 4 de 9 en triples, aunque lanzó un global de 7 de 20 en el tiro.
Carmelo, por el contrario, tuvo buenos minutos, aunque su 11 puntos en 15 lanzamientos escuecen. ¿Su problema? Ese doloroso 0 de 8 en triples.
"Frustrado y triste son dos buenos adjetivos para este momento", decía CJ McCollum tras el partido. "Hemos sido inconsistentes, obviamente, con nuestro balance, más inconsistente que consistentes. Caídas, faltas, rebotes ofensivos que permitimos, un poco de todo. No pienso que estuvimos mal en la defensa, pero esos pequeños detalles fueron dolorosos".
Sin Hassan Whiteside, Anthony Tolliver hizo las veces como falso cinco. Un jugador cumplidor, sí, pero que se queda corto y que poco pudo hacer contra Tristan Thompson, que fulminó a los Blazers por dentro con sus 25 puntos y 9 rebotes. En general, la batalla de los tableros es una que Portland no podía ganar: los Cavs buscaron jugar grande y los de Terry Stotts pequeño, con un resultado de 51-38 en los rebotes.
Melo había firmado ante los Milwaukee Bucks un muy buen tercer partido. Acertado desde el triple, pasó muy bien la pelota en un par de ocasiones y apareciendo como figura de estos Blazers. Sin embargo contra los Cavs fallaron los triples. Portland por lo general lanzó bien, pero el desacierto de Anthony costó caro.
La defensa general de Portland se resintió al jugar con Carmelo y Tolliver tantos minutos. Es normal. Jugadores limitados y con carencias atrás que además superan la treintena. En estos momentos y tras una nueva derrota, el equipo de Oregón se sitúa como la defensa número 22 de la NBA. Dato terrible.
"Todos hemos estado en situaciones así antes. Tenemos que avanzar, resolverlo y todavía es pronto. Saldremos de esta. Tenemos que arreglar algunas cosas que sabemos que tenemos que arreglar y los partidos que estamos perdiendo son por pocos puntos. Tenemos que seguir luchando y hay que comprender que es pronto, pero tener ya ese sentimiento de urgencia", comentaba Carmelo tras la derrota por 104-110.
Con un balance de 5-12, solo los Golden State Warriors están por detrás de los Blazers como los dos peores equipos del Oeste. Portland volverá a jugar en la madrugada del lunes ante los Chicago Bulls fuera de su casa.
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