La historia conecta a la mejor liga de baloncesto del mundo con el equipo más poderoso fuera de la NBA, el Real Madrid. Palmarés, proyecto, jugadores... La casa blanca es potencia y, desde hace años, posiblemente la mejor organización de baloncesto a nivel élite en Europa.
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Este pasado 30 de junio, Chema de Lucas informaba del fichaje cerrado para la próxima temporada 2020-2021 de Ante Zizic por el Real Madrid. El joven pívot croata de 23 años supondría un golpe en la mesa de los merengues, que desde hace tiempo coleccionan talentos más que válidos para la NBA.
Los envían para allá, como Luka Doncic y quién sabe si Facundo Campazzo, los mantienen en sus filas, caso Sergio Lull, los reciben en sus regresos, como Jorge Garbajosa, que pasó por el Khimki antes de firmar con el Madrid, o los fichan directamente. Estos últimos son los protagonistas del artículo: jugadores que se marcharon de la NBA para incorporarse a las filas del Real Madrid desde el año 2000.
Marko Jaric (2009-2010)
Al igual que triunfar en la NBA no garantiza repetir éxitos fuera de ella, quizás Marko Jaric vio unas expectativas enormes sobre su fichaje por el cartel mediático que tenía y el mal momento del Real Madrid. El proyecto blanco se tambaleaba desde hacía tiempo, mientras el eterno rival, el FC Barcelona, era más fuerte que nunca y caminaban hacia el título de la Euroliga de 2010.
El Madrid apostó por Jaric, un alero versátil de 2 metros que podía adaptarse a diferentes papeles y quintetos. Si bien su rendimiento nunca fue extraordinario, en la única temporada que jugó con el Madrid cumplió sobre el parqué. Fueron las expectativas las que jugaron una mala pasada en este caso.
Jaric estuvo siete temporadas en la NBA, todas ellas en equipos del fondo de la tabla, y aunque tuvo buen rendimiento en varias de ellas, nunca fue una gran figura. En la 2004-2005 promedió 9,9 puntos, 6,1 asistencias y 3,2 rebotes por partido. La amplitud del campo y el estilo permitían destacar sus habilidades como pasador, pero en el Madrid quedó más como complemento.
Lo cierto es que siempre se habló mucho de Jaric como estrella mediática. Su relación con la modelo Adriana Lima, el cartel de jugador europeo NBA con minutos (28,2 de promedio entre 2003 y 2009) y ese fichaje por el Madrid provocaron que se esperase muchísimo de él. Dejó buen rendimiento y decentes cifras y porcentajes, pero los blancos necesitaban un salvador y Jaric jamás lo sería. En septiembre de 2013 firmó con los Brooklyn Nets, aunque le cortaron durante la pretemporada.
Sergio Rodríguez (2010-2016)
Entre los jugadores de más talento que ha dado jamás el baloncesto español. El Chacho destacó en el Estudiantes y emprendió bien joven el viaje a través del Atlántico. La primera etapa de tres temporadas en Portland se saldó con pocos minutos, aunque supo aprovechar las oportunidades que tuvo.
La 2009-2010, con 23 años, Sergio comenzó en Sacramento con menos minutos todavía y salió traspasado a New York Knicks, donde jugó su mejor baloncesto recibiendo más confianza. Aun así, en el verano de 2010 decidió regresar a Europa tras recibir la oferta del Real Madrid. Un año después del fichaje de Jaric y su decepción, llegaba otro exNBA que sí disponía de la calidad -y de un mejor entorno en los años posteriores- como para marcar diferencias.
El Chacho saldó su etapa en el Madrid con títulos y galardones, brillando más que nunca y alcanzando el punto perfecto de madurez y frescura. La Euroliga, tres ACB, cuatro Copa del Rey, tres Supercopas de España y una Intercontinental, además de varios MVP, incluido el de la Euroliga en 2013-2014. Tras su brillante etapa volvió a la NBA un año con Philadelphia 76ers. En su segundo regreso firmó con CSKA para ganar otra Euroliga.
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Rudy Fernández (2011, 2012-presente)
El año rookie de Rudy Fernández fue prometedor como pocos en la NBA. Tras el Rookie del Año de Pau Gasol, pocos españoles han dejado un impacto así en la mejor liga del mundo. El rol de sexto hombre anotador encajaba a la perfección con ese joven Rudy de 23 años, atlético, atrevido y con mucha experiencia para su edad.
Más allá de lesiones y pérdida de minutos de cara al segundo año, Fernández hubiese tenido una larga carrera en la NBA de no ser por su espalda. Ganó de nuevo más relevancia en su tercera temporada con los Blazers, aunque ya no era igual que en su año de debut. La 2011-2012 tuvo lockout y Rudy se incorporó al equipo blanco durante unas semanas, volvió a Estados Unidos para jugar con los Denver Nuggets y, en el verano de 2012, firmó con los blancos.
Pilar fundamental durante los éxitos del Madrid de Pablo Laso, Rudy ha sabido reconvertirse de joven estrella europea a complemento defensivo de élite. A tal punto llega la evolución que lleva años siendo una estrella en lo suyo. Puede ser más o menos consistente en el tiro, pero su entrega, apariciones en momentos clave y brutal rendimiento en defensa le sitúan como uno de los perimetrales más exitosos de España.
Serge Ibaka (2011)
Caso similar al de Rudy, aunque Serge regresó a la NBA para quedarse y tener larga carrera. Aterrizó en Estados Unidos como un joven saltimbanqui cuyos músculos y muelles impresionaban. Ahora, como veterano en sus 30, ha evolucionado como jugador hacia una versión más madura y diferente sobre el parqué. Menos salto, más lanzamiento y, en general, producción superior.
Ibaka estuvo durante 40 días con el Madrid durante el lockout y algún que otro partidazo firmó, como los 16 puntos y 15 rebotes ante DKV o los 6 tapones frente al Zaragoza. Una auténtica bestia. Ahora es campeón de la NBA con Toronto Raptors.
Gustavo Ayón (2014-2019)
El Titán sorprendió al baloncesto europeo con el rendimiento ofrecido durante la temporada 2010-2011 en ACB. Sus prestaciones le dieron una oportunidad y se marchó a la mejor liga del mundo, guardando el FC Barcelona su derecho de tanteo. Por si acaso, por si regresaba un jugador que podía ser élite en las pinturas del Viejo Continente.
Ayón tuvo un sólido papel como novato en los New Orleans Horntes del primer año sin Chris Paul. Jugaba 20,1 minutos por partido y promedió 5,9 puntos, 4,9 rebotes, 1,4 asistencias, 1 robo y 1 tapón. Fue la temporada en la que más minutos, balón e importancia tuvo.
Ayón salió traspasado a Orlando y de allí a Milwaukee y Atlanta. Perdió protagonismo y su regreso a Europa parecía evidente, pero fue una sorpresa cuando se anunció su fichaje por el Real Madrid después de que el Barcelona renunciase a sus derechos.
Así, los blancos veían a su ídolo Ante Tomic de color blaugrana, mientras ellos se quedaban al descarte. Sin embargo, la historia sonrió al Madrid: Ayón fue clave en esa 2014-2015 en la que ganaron todos los títulos y su etapa en la capital española fue extraordinaria. El pívot que mejor se ha entendido con Pablo Laso, pese a sus problemas defensivos y desde la línea de tiros libres. Buscó su regreso a la NBA en el verano de 2019 y, ante la falta de ofertas, firmó por el Zenit.
Jeff Taylor (2015-presente)
Quizás el caso más sorprendente de la lista en conseguir una etapa tan larga en el Real Madrid. El contexto es positivo para que un perfil como Taylor pase cinco años en este equipo, impensable años atrás. Se trata de un jugador sin brillo ofensivo, de enormes capacidades en defensa y cuyo rendimiento ofensivo es limitado.
Taylor tuvo un buen desempeño en la 2013-2014 con Charlotte como alero de banquillo. Los problemas llegaron en noviembre de 2014, cuando recibió una suspensión de la NBA y su equipo por golpear a su novia. Taylor terminó contrato y encontró la puerta de la NBA cerrada. Firmó el verano de 2015 con el Madrid y durante años ha sido clave por ser uno de los mejores defensores exteriores de Europa. Aunque en este momento existen dudas sobre su continuidad, según diferentes informes, es innegable su aportación como perro de presa al lado de los Lllull, Doncic y compañía.
Edy Tavares (2017-actualidad)
Muchos pensaron que su fichaje era un parche, pero desde las oficinas jamás lo vieron así. El gran problema de Tavares era que la NBA rechazaba perfiles como el suyo. Jugadores largos en altura y envergadura, de menos agilidad y cuyo juego está mejor construido para la Europa actual.
Tavares apenas recibió oportunidades antes de regresar a FBA. Atlanta primero y Cleveland después, Edy pasó minutos en la G League y fue compañero de LeBron James, incluso por pocos meses no pudo disfrutar del título de 2016. Ahora es uno de los jugadores más determinantes en Europa y el Madrid le ha renovado con una ficha a la altura hasta 2024.
Salah Mejri (2019)
Quizás el caso más sorprendente de la lista. ¿Necesitaba el Madrid a Mejri para esta temporada? No, pero era un movimiento que podía salir muy bien. Recordado por sus actuaciones con Túnez en torneos internacionales, este pívot de casi 2,20 metros y lanzamiento exterior es una rara avis para Europa.
Después de jugar en el Madrid entre 2013 y 2015, Mejri saltó a la NBA. Ha estado cuatro temporadas en Dallas con un rol reducido de 12 minutos por encuentro, pero dejó excelentes sensaciones en el vestuario. Hubo diferentes muestras públicas de su calidad como compañero y cuajó una gran relación con Luka Doncic durante la temporada 2018-2019, su última con los Mavs, la primera del esloveno.
Es posible que su fichaje fuese para darle un lugar de recuperación, tratar bien a una cara conocida y, si recuperaba el tono, darle la oportunidad de sumar en positivo. No ha sido así, pero Salah Mejri es el último fichaje del Real Madrid desde la NBA. Al menos, hasta que lo de Zizic sea oficial.
