El destino ha brindado una oportunidad de oro a Marc Gasol. Después de años de aspiraciones frustradas, de buen trabajo sin recompensa y lesiones desalentadoras, se encuentra a 48 minutos de convertirse junto a Serge Ibaka en los segundos españoles en ser campeones de la NBA. Un camino que ya recorrió Pau Gasol hace 10 años con su primer anillo enrolado en las filas de Los Ángeles Lakers junto a Kobe Bryant.
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La gesta de Pau Gasol le convirtió en leyenda del baloncesto nacional, la culminación de un sueño iniciado en 2001 y que jamás pensó que podría llegar a hacerse realidad. Su llegada a California en el invierno de 2008 le catapultó a su primera intentona, unas Finales ante los Boston Celtics en las que la suerte no corrió del lado angelino, con un resultado final de 4 a 2 a favor de los orgullosos verdes.
Tan solo 12 meses más tarde, Bryant y Gasol consumaron su redención con la victoria ante Orlando Magic en las Finales de 2009. Un triunfo que fue mucho más que un título, un anillo que mantuvo en vilo a todo el país y convirtió a Pau en leyenda como el jugador más laureado en la historia del baloncesto nacional.
Han tenido que pasar justamente 10 años desde ese primer anillo conseguido un 14 de junio para que volvamos a poder disfrutar de la posibilidad de ver a otro español en esa misma circunstancia. Si bien es cierto que Serge Ibaka en las Finales de 2012 estuvo cerca de conseguirlo después de que los Thunder ganasen el primer encuentro, en esta ocasión tanto el mencionado Serge como Marc están sumamente cerca de conseguir coronarse.
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48 minutos separan a Gasol de emular a su hermano mayor. 48 minutos y el objetivo de evitar que Golden State Warriors alargue la serie un partido más, lo que podría ampliar las posibilidades de que regresase Kevin Durant con todo lo que eso supone.
Gasol nunca ha escondido su esperanza de ganar el titulo, repitiendo hasta la saciedad en su etapa en Memphis Grizzlies que su objetivo era continuar luchando por el anillo. Toronto le ha dado una oportunidad única en la vida, en un momento idóneo y en un contexto en el que ha encajado a la perfección. Gasol representa un pilar defensivo dentro del esquema de Nick Nurse, el organizador y responsable de frenar todo aquello que suceda en la pintura. Además, Marc está volviendo a ser importante en el ataque con promedios de 13 puntos y 6 rebotes que le catapultan como un recurso imprescindible para los canadienses.
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"El camino para llegar al anillo es muy largo", decía en Europa Press en 2014. Su sueño era ganarlo con Memphis Grizzlies, pero las circunstancias le arrebataron la oportunidad: lesiones, traspasos o el nivel del resto de rivales alejó a Gasol de luchar por el campeonato.
"Mi ambición por ganar e intentar luchar por el anillo no va a cambiar", aseguraba Gasol en Informe Robinson en 2017. Una convicción que está llevando hasta las últimas consecuencias y con la seguridad de estar en el lugar y momento idóneo.