Con el título de campeón y el MVP de las Finales, Giannis Antetokounmpo salta a la palestra como potencial mejor jugador del mundo. La estrella de Milwaukee Bucks ejerció su despiadado dominio en Playoffs para conseguir el primer trofeo de la franquicia en medio siglo. Sin embargo, no quiere relajarse. Así lo ha dejado claro en una entrevista en el canal griego COSMOTE TV, recogida por Eurohoops.
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"No me llames campeón", abre Giannis. "Si solo escuchas cumplidos, te relajas y esto es algo que no quiero". Si algo ha dejado claro a sus 26 años (cumple 27 en diciembre) y tras ocho temporadas en la NBA, es que el trabajo y el esfuerzo son innegociables.
"No puedo ser falso. Yo soy Giannis, pero llamarme MVP, llamarme campeón, llamarme el mejor jugador del mundo, es algo que podría frenarme. Y no quiero que nada me detenga", explica el griego. "Quiero mirar hacia adelante y ser mejor. Por eso no entreno con otros jugadores. No quiero ser amigo de ellos. Si hacemos esto y luego tomamos un café, ¿iré a la cancha y usaré mi codo contra ellos? ¿Les bloquearé igual? No puedo hacer eso porque soy auténtico. Si amo a alguien, lo amo también en la cancha. Soy plenamente consciente de eso y no quiero ponerme en esa posición”.
Giannis ya explicó hace años esa característica diferencia respecto a la mayoría de estrellas de primera fila, y jugadores en general de la liga, de no entrenar con ellos. Prefiere evitar acercamientos y, de paso, que conozcan sus rutinas y formas de trabajo. Y la vía del sacrificio es la que ha llevado a Antetokounmpo a donde está ahora.
Otro gran aspecto de la estrella de Bucks es que no corta sus respuestas. Dice lo que piensa. Al ser preguntado por esa corriente que le sitúa por debajo de otras estrellas, incluso dentro del propio estrellato de la NBA, no conoce el motivo: "No sé por qué. Quizás porque no soy producto del mismo sistema, pero tampoco lo es Luka Doncic. No lo sé. Quizás, por mi juego, porque es poco ortodoxo, quizás no les guste”.
Tampoco guarda su opinión sobre aquella polémica que saltó sobre James Harden, cuando el entonces jugador de Houston Rockets parecía señalar a Giannis por tener menos habilidades individuales. “En primer lugar, Harden nunca mencionó mi nombre. He visto este video. Creo que lo que quiso decir fue que si él también midiese 2,10 metros, saltara y machacara, hubiera sido más fácil para él, pero tenía que aprender a jugar. Creo que los medios lo hicieron por mí. Harden es un gran jugador y cuando estoy en la cancha contra él tengo que jugar muy duro. Es un miembro del Salón de la Fama, no tengo nada en contra de él", aclara Giannis. "Y esa no fue una motivación para mí contra los Nets. Mi motivación siempre es cómo puedo mejorar y ayudar a mi equipo”.
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En la última votación del staff de NBA.com para elegir a los 30 mejores de la liga de la próxima temporada, Antetokounmpo fue votado como segundo de la lista solo por detrás de Kevin Durant y un puesto por delante de LeBron James. Sin embargo, él no lo ve así.
“Me gusta ser cazador. No soy el mejor jugador del mundo", responde al ser preguntado por el top de jugadores. "¡Te lo digo, no lo soy! KD, LeBron, Kawhi, Luka, Curry, AD podrían serlo. Yo no lo soy. Todavía estoy cazando a los grandes de todos los tiempos. LeBron sigue siendo el mejor jugador del mundo”.
El griego también habla sobre las Finales y la milagrosa recuperación vivida tras lesionarse ante Atlanta Hawks en Finales de Conferencia Este. “No debería haber jugado las Finales. Me lesioné en el Game 1 (contra Hawks). Estaba rezando. Perdimos. En el Game 2, anoté 40 y perdimos. Me estaba cagando en los pantalones, tenía miedo después de anotar 40 y perder. Después de eso, solo queríamos defender nuestra casa, pero luego mis compañeros reaccionaron, el equipo reaccionó, Jrue estaba por todos lados".
"La clave fue cómo manejar mi miedo, mi ansiedad", confiesa Giannis. "Hablaba con un psiquiatra deportivo todos los días, me ayudó a ser yo mismo. Los tiros libres fueron un problema mental y quiero seguir así en la próxima temporada (después de hacer 17 de 19 en el Game 6 de las Finales). Y quiero ver si podemos repetir esto como equipo. Quiero ver si podemos volver a hacerlo, yo mismo, mis compañeros, los dueños, todos”.
Antetokounmpo deja claro que, pese a su escandaloso palmarés y el reciente título, todavía no le sirve. Cumple 27 años en unos meses y quiere conseguir mucho más. Convertirse en una leyenda de la NBA comprende un elevado precio que Giannis está dispuesto a pagar. Ya es historia del baloncesto, pero quiere ir más allá. La mentalidad del griego es ejemplar para cualquiera que busque mejorar, trabajar sus debilidades y crecer en la vida.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.