Informe de despedida: ¿Qué nos perderemos de Golden State Warriors en el cierre de la temporada 2019-2020?

Author Photo
Stephen Curry, Andrew Wiggins, Juan Toscano-Anderson

El anunció que realizó la NBA este jueves 4 de junio, con la aprobación de la Junta de Gobernadores sobre el formato a usar para reiniciar la temporada y ponerle un cierre a la 2019-2020, luego de la suspensión del 11 de marzo por al avance del coronavirus COVID-19, hará que 22 equipos vuelvan a la acción (sería desde el 31 de julio) para la reanudación. Es decir que ocho conjuntos, los que se encontraban en la parte de abajo de las posiciones, entrarán en vacaciones a la espera de la 2020-2021.

Más | La NBA anunció la aprobación de su formato de regreso: fechas, detalles y calendario para reiniciar la temporada 2019-2020

El parón por la pandemia cortó ocho realidades diferentes que, por más que estaban relacionadas a equipos del fondo, nos dejarán sin algunas historias interesantes que íbamos a ver en el cierre de la Fase Regular de haber seguido su curso normal. Y aquí estamos para hacer una especie de informe de despedida de cada uno de esos ocho equipos.

Toca empezar con quien tenía el peor récord de la 2019-2020: Golden State Warriors, quien se fue de un extremo al otro entre temporadas, pasando de las Finales a las mayores opciones de la Lotería para el próximo Draft a partir de su récord de 15 triunfos y 50 derrotas. Vamos con tres historias que nos perderemos del conjunto de San Francisco.

Más | Ocho observaciones sobre los ocho equipos que terminaron su temporada 2019-2020 de la NBA

El regreso de la excelencia de Curry

stephen curry

No hay muchas dudas sobre la afirmación: Stephen Curry ha sido uno de los jugadores revolucionarios del último lustro NBA. Con su rango ilimitado para el triple, su técnica depurada y sensacional y su ingenio y elegancia, fue el líder de un equipo que se llevó todas las miradas de los últimos años, construyendo una dinastía que no habría que dar por terminada antes de tiempo más allá de este respiro que se dio en la 2019-2020.

Ver a Steph en cancha es un placer para cualquier amante del deporte, y es una verdadera lástima que apenas lo hayamos visto durante cinco partidos en esta campaña.

En el cuarto partido del curso, el 30 de octubre de 2019, el base sufrió una fractura en la mano izquierda en un encuentro frente a Phoenix Suns, y tuvo que pasar por el quirófano. Una larga recuperación y rehabilitación que se extendió hasta el 5 de marzo, cuando volvió contra Toronto Raptors con 23 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias que eran mucho más que eso. Eran la ratificación de que, más allá de que lo colectivo no iba a funcionar de manera deslumbrante, el final de temporada de los Warriors iba a tener la excelencia de Curry todas las noches.

Pero un cuadro gripal lo sacó de los siguientes dos encuentros y luego llegó la suspensión. Así, adiós a una 2019-2020 que, en los fríos números, dirá que terminó con promedios de 20,8 tantos (apenas 24,5% triples), 5,2 recobres y 6,6 pases para anotar en 27,8 minutos durante sus cinco veces en cancha.

El aviso para los rivales es claro: Steph volverá por su lugar en la cima en la 2020-2021.

El rendimiento de Andrew Wiggins junto a Curry

Wiggins

El límite de traspasos de febrero dejó un movimiento muy llamativo: la llegada de Andrew Wiggins a la Bahía, en la operación que envió a D'Angelo Russell a Minnesota Timberwolves. El canadiense, #1 del Draft 2014 y con una carrera cuestionada por su falta de explosión después de 6 cursos y medio con los Wolves, encontraba el cambio de aire que muchos pedían para poder -de una vez por todas- acercarse al potencial que parecía tener.

Con Wiggins, la oportunidad y el contexto lo son todo: Golden State no necesitará que sea una estrella (para eso están Curry, Thompson y Green), sino un complemento perfecto. Y en ese entorno con menos responsabilidades y mayores oportunidades, su situación genera una expectativa tremenda.

Más | La posesión: la gravedad de Stephen Curry que puede desbloquear el potencial de Andrew Wiggins

Wiggins jugó 12 partidos en los Warriors, con números interesantes de 19,4 puntos (45,7% campo), 4,6 rebotes, 3,6 asistencias, 1,3 robos y 1,4 tapones en 33,6 minutos. Aunque claro, quizás no hubo partido más importante que el único que pudo compartir con Curry, ese frente a los Raptors, donde cerró con 21 puntos, 10 rebotes, 2 asistencias y destellos de las situaciones que se le pueden presentar con Golden State completo, donde la gravedad de las estrellas le puede abrir otro panorama diferente para rendir como nunca.

A presentarle atención a lo que puede encontrar Steve Kerr con un jugador con muchísimo talento que, parece, encontró un contexto ideal por primera vez en su carrera.

Juan Toscano y varios secundarios en su lucha por pertenecer 

Juan Toscano

Mirarle el vaso medio lleno a las cosas suele ofrecer una cuestión positiva para rescatar de diferentes situaciones. Y si bien los Warriors se encontraron en el fondo de la tabla y sin opciones reales de competir por eso a lo que estaban acostumbrados, esa misma situación fue la que permitió entregar más oportunidades a actores secundarios (y en algunos casos desconocidos) que estaban luchando en una carrera silenciosa por pertenecer a la liga, por ganarse un sitio a pulmón que, en el último mes de acción, suele ofrecer aún más opciones.

Se sabe que el conjunto de Steve Kerr mira hacia la 2020-2021 pensando en un regreso a la pelea grande, y que ese contexto tiene una base establecida y clara: Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Andrew Wiggins como pilares; Kevon Looney como otro habitual y que fue parte de la dinastía; más Eric Paschall, Jordan Poole y Alen Smailagic como rookies y valores jóvenes. Sabiendo que los cuatro centrales se llevan casi la totalidad del espacio salarial (casi 130 millones de dólares en contrato para el próximo curso), la franquicia necesita algo claro: piezas que rindan y tengo el mínimo costo.

Por eso la 2019-2020 estaba siendo un interesante banco de pruebas para varios, como el caso del mexicoamericano Juan Toscano-Anderson, quien había hecho la pretemporada con un contrato de prueba, no encontró lugar al inicio de la 2019-2020 pero -a partir de un sólido trabajo en la G-League con Santa Cruz Warriors (12,5 puntos, 9,2 rebotes y 2,6 asistencias)- se ganó el llamado con Golden State en febrero, cumpliendo con su gran sueño de debutar en la liga.

Juan dejó su sello: intensidad, defensa, compromiso, entrega y algunos puntos cuando las opciones se presentaron. Los promedios de 5,3 puntos, 4,0 recobres, 2,0 asistencias y 1,0 robos en 20,9 minutos (6 de sus 13 partidos como titular) no hacen justicia con muchos de los intangibles que aporta. Tiene vínculo con la franquicia rumbo al próximo curso, aunque no es garantizado, por lo que cada opción de mostrarse valía oro. De todas maneras, estará en la consideración para ganarse un lugar como pieza de recambio.

Más | La Pizarra NBA: Juan Toscano y su valor en Golden State Warriors más allá de los intangibles

En la misma línea, aunque con un rol más preponderante, se encontraba Marquese Chriss, quien renació en San Francisco y mostró parte de aquel talento que lo puso como un interesante interno del futuro. En 59 encuentros en la temporada, promedió 9,3 tantos (54,5% campo), 6,2 recobres, 1,9 asistencias y 1,1 tapones en 20,3 minutos. Más importante aún, mostró destellos de ser ideal para una estructura "completa" de los Warriors. Su vínculo para la 2020-2021 es parcialmente garantizado.

Más | ¿Puede Marquese Chriss ser pivote titular de unos competitivos Golden State Warriors?

En la misma situación está Damion Lee, quien vio su contrato two-way convertido a uno convencional a mitad del curso. Un escolta peligroso que, con espacios, tiene la capacidad para hacer daño con su lanzamiento exterior (12,7 unidades y 36% triples en 29,0 minutos este año). Otro que pasó de un two-way a un vínculo tradicional (aunque no garantizado para la 2020-2021) es el base Ky Bowman, clave durante la ausencia de Curry (10,7 tantos, 2,8 rebotes y 4,3 asistencias en 12 partidos desde el inicio). Y el último para mencionar es el canadiense Mychal Mulder, escolta que jugó siete partidos antes del cierre del curso, sumando cuatro con al menos 14 unidades.

Su principal mes de pruebas quedará para otro momento. Pero cada uno, a su manera, hizo su trabajo pensando en la carrera por seguir en la competencia.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Leandro Fernández Photo

Editor Jefe de las ediciones en español de The Sporting News.