La temporada de Jaylen Brown no terminó como todos esperaban. Después de experimentar una mejoría sustancial en su juego y haber dado un paso adelante como líder en los Boston Celtics, a 7 partidos de concluir la Fase Regular, el alero sufrió una mala caída que derivó en una complicada lesión que le obligaría a quedarse fuera de juego. El pasado 2 de mayo ante los Portland Trail Blazers, Brown experimentó un desgarro en el ligamento de su muñeca izquierda, debiendo pasar por quirófano y condicionando incluso su offseason.
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Una baja que dejó a Jayson Tatum como única referencia verde en un final de curso que acabó de un modo nada positivo para los Celtics, superando el Play-In pero siendo vencidos con cómodidad por Brooklyn Nets (4-1). A esa derrota le sucedieron numerosos cambios en la franquicia que han hecho que rumbo a la temporada 2021-2022 los de Massachusetts partan como uno de los conjuntos llamados a dar un gran salto en cuanto a rendimiento, algo que no será posible, no obstante, sin Brown.
Y es que el alero, que pronto cumplirá 25 años, se ha consagrado como una de las piezas clave del proyecto, creciendo despacio pero de manera constante hasta convertirse en un fiable anotador, un creador de juego en el que confiar así como poniendo remedio a sus lagunas defensivas. Su elección como All-Star por primera vez en su trayectoria a razón de 24,7 puntos, 6,0 rebotes y 3,4 asistencias fue la confirmación de la tendencia al alza que se intuía desde 2019, asentándose definitivamente como referencia en Boston.
Esta campaña será de suma importancia para los intereses de los Celtics pues supondrá el debut de Ime Udoka como técnico con una plantilla en mejores condiciones para competir que la anterior, de la que se esperan buenos resultados. Más teniendo en cuenta la dupla formada por Brown y Tatum, la cual representó el 45% de la anotación del equipo por encuentro, siendo estos los encargados de llevar al grupo al siguiente nivel.
"No solo se va a tratar de Jayson Tatum y de mí, vamos a necesitar a todo el mundo: Marcus Smart, Rob Williams, Al Horford. Tdo el mundo contribuye", aseguró Jaylen Brown en una entrevista con The Undefeated. "Va a tratarse de un esfuerzo de equipo, de la organización y de los entrenadores. Estamos cambiando la cultura, dentro y fuera de la cancha. Y va a requerir algo de todos nosotros. Si solo se trata de JT y yo, no va a funcionar".
Brown, que se encuentra ahora mismo combinando el trabajo de pista con sus estudios, asegura que durante toda la offseason ha centrado sus esfuerzos en recuperar su muñeca izquierda, de la que tuvo que operarse. Por otro lado, uno de los focos de su entrenamiento ha sido mejorar su capacidad de crear juego. "Quiero poder ser un mejor creador de juego esta temporada. Realizar las jugadas correctas y empoderar a mis compañeros", dijo el alero. "Quiero ganar partidos. Así que cada temporada la afronto con la mentalidad de mejorar. Mi cuerpo está mucho mejor, soy más atlético de lo que era el pasado curso. Tuve problemas en una rodilla el pasado año y espero no tenerlas este".
El apartado físico va a ser una de las claves del año de Boston y en especial de Brown, que pese a no acostumbrar a perderse muchos partidos, sí ha solido arrastrar dolencias y lesiones leves durante la Fase Regular a lo largo de los últimos cursos. Pese al infortunio sufrido el pasado mes de abril, el jugador de los Celtics asegura que su objetivo es estar preparado para cuando arranque la pre-temporada el próximo 28 de septiembre.
"Ese es el objetivo", respondió a la pregunta sobre si estaría para el inicio del training camp. "Mi muñeca ha ido curando. Hay días mejores que otros. Solo tengo que seguir trabajando, pero estoy emocionado por estar ahí en el campus, con mis compañeros y poder comenzar a construir. Me he perdido mucho tiempo, así que entro en esta temporada pensando que estoy listo y quiero jugar".
El conjunto verde arrancará su pre-temporada la próxima semana y tendrá su primer encuentro amistoso el lunes 4 de octubre frente a Orlando Magic.
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