Se acerca el desenlace de la temporada para los Dallas Mavericks. Ncesitarían más que un milagro para entrar en los playoffs 2019. El verdadero objetivo de la franquicia es seguir trabajando en la plantilla para rodear, de cara al curso próximo, a sus jóvenes estrellas europeas de un equipo competitivo. Conseguir que en no mucho tiempo Luka Doncic y Kristaps Porzingis tengan la opción de aspirar al anillo.
La llegada de Porzingis hace mes y medio redobló las ilusiones de los Mavs. A la espera de ver qué ocurre con Dirk Nowitzki, en Dallas cuentan con un tándem de jóvenes del Viejo Continente para ocupar el lugar de la leyenda alemana.
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Más de un año ha transcurrido desde la lesión en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda del letón. Por entonces aún era el jugador franquicia de los Knicks. Rota esa relación con los neoyorquinos, el letón ha encontrado su sitio en territorio texano.
“Me encuentro perfectamente. Tengo muchísimas ganas de volver, pero también tengo que ser paciente y esperar el momento correcto”, explicaba el pasado viernes en Orlando en una conversación de la que NBA.com formó parte. "Todavía no tengo respuestas del entrenador (Rick Carlisle) sobre mi regreso se producirá en esta temporada. Habló de muchos temas con él, no solo de mi vuelta a las canchas. Yo sigo con el trabajo de recuperación. Estoy muy contento por la mejora física. El otro día estaba observando algunas fotos en mi móvil sobre cuántas horas de trabajo le hemos dedicado. Ha sido realmente increíble. Seguramente, cuando vuelva todo será muy emocionante para mí”.
Porzingis: "En verano hablaré de los Knicks"
Porzingis fue traspasado el 31 de enero por los Knicks a los Mavericks junto a Tim Hardaway Jr., Trey Burke y Courtney Lee. A cambio Dennis Smith Jr., DeAndre Jordan, Wesley Matthews y dos futuras primeras rondas del Draft hicieron el viaje opuesto.
Su afinidad con el equipo que le drafteó con el número 4 de 2015 se fue apagando a lo largo de su prolongado proceso de recuperación. No obstante, prefiere quedarse con lo positivo de su estancia en Manhattan. "Puedo referirme más a las cosas que me gustaron de Nueva York. Tuve una muy buena experiencia en la ciudad, pero todavía me cuesta hablar de los Knicks. Todo ocurrió hace poco tiempo. En el verano, cuando se tranquilicen las cosas, hablaré más profundamente sobre ese tema", detalla Porzingis con su característico castellano de acento andaluz. "La situación fue la que todos conocen, pero ahora mismo prefiero no entrar en ese tema y esperar para valorar aquello cuando esté más relajado. Han sido muchísimas las cosas que han pasado. Aunque también aprendí muchísimo de los Knicks en todos los aspectos", agrega.
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Formado en el hoy conocido como Real Betis de la Liga Endesa, Porzingis celebra la unión con Luka Doncic en Dallas. “Es un chico al que le encanta el baloncesto, se nota que lo lleva en la sangre. Aún es muy joven, pero en la pista no lo refleja. Cuando está jugando parece un veterano”, sostiene. “En parte se debe a la experiencia de jugar en Europa hace muchos años como profesional pese a su corta edad. Seguramente seguirá creciendo como jugador, como persona y será un grandísimo jugador en la NBA", concluye Kristaps.