Los Lakers vuelven a perder y LeBron James no se muerde la lengua tras otro triple-doble

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LeBron James

Los Angeles Lakers 105 - 110 Memphis Grizzlies

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Los astros parecen haberse alineado para evitar que LeBron James y Los Angeles Lakers ganen un encuentro. De los últimos 5 han conseguido ganar 1 solo encuentro y en todos ellos James ha tenido que remar como nadie para tratar de evitar el naufragio. En la noche de hoy esto ha sido parcialmente diferente. 

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De nuevo, James ha firmado un asombroso triple-doble con 24 puntos, 12 rebotes y 11 asistencias que ha incluido 5 pérdidas, pero los verdaderos protagonistas han sido Brandon Ingram y Kyle Kuzma. Ingram ha sido de largo el máximo anotador del encuentro con 32 puntos con un 66% en tiros de campo incluyendo 3 triples sin fallo, demostrando que hay un potencial por explotar en el jugador de los Lakers. Mientras, Kuzma ha acabado con 22 puntos y 4 rebotes siendo la tercera pata de una mesa que necesita un jugador que de el plus necesario para convertir a los Lakers en un equipo aspirante.

Una derrota de los Lakers patrocinada por unos Grizzlies que cotizan al alza después del traspaso de Marc Gasol y que se han prometido competir lo que resta de temporada. Mike Conley sigue siendo el líder del equipo y lo ha demostrado con sus 30 puntos y 5 asistencias a los que se ha sumado Jonas Valanciunas con 20 puntos y 13 rebotes para sumar la vigesimocuarta victoria del equipo en este año.

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Todo esto ha potenciado que James no se haya mordido la lengua y haya soltado esta rajada de la que se ha hecho eco ESPN. "En este punto, si aún permites que las distracciones afecten la forma en que juegas, esta es la franquicia equivocada para ti y deberías decir: 'Escucha, no puedo hacer esto'". Unas duras palabras de un líder como James que habrán caído como plomo sobre las cabezas de los jugadores jóvenes de los Lakers. Unos jóvenes que hoy dieron su máximo, anotando 54 puntos y comandando al equipo. "En serio, si estás distraido por la presión de los Playoffs...", criticaba LeBron.

"Sólo sal y haz tu trabajo", continuó. "Hacemos nuestro trabajo a un alto nivel. Eso no es una distracción, eso es lo que quieres. Eso es lo que quieres en cada partido, quieres sentir que estás luchando por algo". De esta manera continuaba LeBron que después de sumar la segunda derrota consecutiva tras caer frente a los Pelicans no ha tenido miedo de hablar sin tapujos en el vestuario, rodeado de sus compañeros. Parece que las opciones de los Lakers de llegar a la post-temporada cada vez se apagan más y solo un milagro puede conducirles hacia salvar la temporada de esa manera. 

"En los últimos años se han acostumbrados a las derrotas y yo no estoy acostumbrado", dijo James. "No estoy acostumbrado a eso. Nunca me sentiría cómodo perdiendo", sentenciaba.

Los Lakers fueron incapaces de imponerse al peor ataque de la NBA y de superar la defensa que tanto Conley como jugadores como Joakim Noah, Avery Bradley o Justin Holiday proponían a los angelinos. Un último cuarto a la desesperada por parte de James fue insuficiente para salvar los muebles de los visitantes y el control de Conley y el acierto de Bradley fueron lo necesario para que los Grizzlies sumaran un triunfo más.

Autor/es
Sergio Rabinal Photo

Sergio es productor senior de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.