"Decepcionante". Así califica Sam Presti la temporada de los Thunder. El general manager, según recoge Royce Young (ESPN) en su cuenta de Twitter añade otras dos palabras para definir el curso de un equipo al que Damian Lillard mandó de vacaciones la pasada semana con un triple sideral sobre la bocina en quinto y definitivo partido de su serie de primera ronda: "potencial" e "inconsistencia".
Dos términos que, efectivamente, hacen justicia a los que OKC ha sido en la 2018-19. Durante ciertas fases fue un equipo a tener muy en cuenta, capaz de marcar la diferencia en ambos aros. Durante enero y febrero, con los Rockets aún recuperándose de un flojo inicio y la enfermería llena, los Thunder dieron la impresión de ser la mayor amenaza en el Oeste para los Warriors. Pero, una vez que el hombro de Paul George dijo basta nada más concluir el parón por el All-Star de Charlotte, los truenos cayeron en picado. Aun sin Jusuf Nurkic, Portland controló con puño de hierro una eliminatoria en la que evidenció estar uno o dos peldaños por encima. "Nos patearon el trasero", define, sin tapujos, Presti.
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Con la reputación de ser uno de los mejores GM del universo NBA, Presti no ha dado con la tecla para volver a hacer que Oklahoma aspire al anillo desde que en el verano de 2016 Kevin Durant hizo las maletas y puso rumbo a Oakland. El Big Three con Carmelo Anthony no funcionó, pero consiguió que Paul George renovase en el estío 2018 para formar una dupla con Russell Westbrook que de una vez por todas volvieran a convertir a la franquicia en potencia.
Sin un tiro exterior fiable y condenados a los tirones de Russ y el talento de PG13, los Thunder han echado en falta una mayor profundidad que ofreciese un plan B fiable desde el banquillo. Con Andre Roberson (un hombre más importante de lo que pueda imaginarse) en el dique seco desde enero de 2018 y la misteriosa rescisión de Abrines, Presti ha reconocido que la decisión de no hacer algún movimiento extra recae sobre él.
Sam Presti says it’s “on me” to not have had added depth behind Alex Abrines, and that the team did not handle his departure well in terms of filling that wing role.
— Royce Young (@royceyoung) 29 de abril de 2019
Presti anticipa que Donovan seguirá
Como también está ahora sobre sus hombros la responsabilidad de elegir qué camino seguir este verano. Con más de 147 millones de dólares comprometidos en salarios para la 2019-20, la forma más lógica de dar una vuelta de tuerca al proyecto pasa por el banquillo. Pero Presti ha anunciado este lunes 29 que espera que Donovan continúe al frente del equipo. La franquicia decidió el pasado verano asegurar la quinta y última de las campañas que el técnico firmó en 2015 tras dejar los Florida Gators, college con el que ganó en 2006 y 2007 la NCAA.
Sam Presti says he anticipates Billy Donovan returning as coach next season.
— Royce Young (@royceyoung) 29 de abril de 2019
En los cuatro cursos que Donovan lleva en OKC, presenta un balance de 199 victorias por 129 derrotas (60,7%) en regular season y un 15-19 en los Playoffs, donde alcanzó en 2016 la final del Oeste ante unos Warriors a los que llegó a dominar 3-1. Eso sí, desde entonces, lleva tres incursiones sin superar la primera ronda con un 4-12 de balance.
Si no hay cambio en el guion, parece que Donovan tendrá la oportunidad de redimirse la próxima temporada. Presti mantiene la misma idea para sus Thunder.
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