NBA

La maravillosa carrera de Vince Carter que marcó una generación

Author Photo
Vince Carter

Las 22 temporadas de Vince Carter en la NBA fueron maravillosas. Aún no sabemos lo que sucederá con la suspensión de la liga de al menos 30 días por la pandemia de coronavirus, pero siempre se le recordará como un jugador que se volvió ídolo de una generación, y que inspiró a niños que lo vieron a Vin en su primeros años en la NBA, ya sea por televisión o en la arena y que años después en enfrentaron. Esta será su última temporada como profesional y por eso es un buen momento para contar todo lo que hizo el originario de Florida en la mejor liga deporitva del planeta. 

Una trayectoria de 22 años en el que las lesiones lo respetaron y que le permitieron jugar 1,541 partidos, lo que lo convierte en el jugador con más campañas disputadas y tercero con más partidos en la historia de la Asociación.  

MÁS | Información del coronavirus para los fans de la NBA

Si bien nunca logró levantar el Larry O'Brien, marcó una época con el resorte que tenía en las rodillas para volar y flotar en el aire para dejar mates espectaculares, que durante muchos años seguiremos disfrutando. 

"Es una manera extraña de decir que se termina mi carrera, realmente lo es. Generalmente se acostumbra cuando no te quedan más partidos, pero aquí -técnicamente- tendría esa posibilidad de unos 15 partidos más. Pero si no lo es, estoy bien con eso. Simplemente es extraño. Mientras nos informaban todo lo que estaba pasando y lo que decía la prensa durante el segundo tiempo, yo estaba pensando 'es así, esto termina de esta manera'", dijo al término del duelo contra los Knicks, en el Madison Square Garden, el pasado 11 de marzo.

Vince deja una huella extraordinaria para mucha gente y por eso es que aquí recordamos algunas de las cosas que logró.

Mate = Vince Carter

Vince Carter

Julius Erving, Michael Jordan, Dominique Wilkins, Zach LaVine, Aaron Gordon son algunos de los matadores que en el concurso dieron un gran espectáculo. Pero nadie como Vince Carter, que desde que llegó a la NBA revolucionó ese aspecto y en cada vuelo levantó a los fans de sus asientos.

Cómo olvidar los giros de 360 grados en los que flotaba en el aire y luego martillaba el aro, los alley-oop en los que suspendía para atrapar el balón sin importar lo alto que se lo mandaban, o a todos los jugadores que dejó en el póster durante tantos años.

El de Carolina del Norte marcó una época. Un tipo atlético con un resorte en las rodillas que no se había visto. Cada robo que dejaba a Vinsanity solo frente a la canasta, provocaba una explosión de energía en las arenas. Y ni qué decir de cuando saltaba frente a rivales, dejando a muchos humillados.

Ahora ya vivimos una era moderna y es común ver a los jugadores saltar y volcar la bola de una forma espectacular. Pero hace 20 años, esa explosividad la vivimos con Vin.

Y todos lo sabemos: escuchamos el nombre de Vince Carter e inmediatamente viene a la mente esos mates.

Una identidad a Toronto

Vince Carter

En 1995 llegó el baloncesto a Toronto, Canadá, una ciudad que tenía como deporte principal al hockey. Los Raptors se presentaron como una de las dos franquicias (la otra los Vancouver Grizzlies) en la expansión internacional de la liga. Tres años después llegó Vince Carter, elegido en la quinta selección del Draft 1998 por los Golden State Warriors y traspasado esa misma noche al equipo canadiense.

Conforme su carrera fue avanzando, se convirtió en estrella. Partido a partido tenerlo en acción fue un espectáculo, especialmente por esa explosividad que contaba en los pies. Emocionó a muchos e introdujo a Toronto en el mundo del baloncesto.

Esa camiseta morada con el dinosaurio enorme en el pecho de los Raptors es una insignia para cualquier coleccionista del baloncesto y es inevitable pensar en ella sin tener en la mente a Carter.

Y además, como cuentan en el documental The Carter Effect, impuso una moda con las zapatillas, colapsó las tiendas canadienses y se convirtió en una de las mayores estrellas para Nike en su momento.

Miles y miles de niños canadienses lo vieron en las tribunas o en las pantallas. Se emocionaron y querían ser como él. Nadie lo logró porque Vince es una leyenda, pero marcó a una generación que es una de las mejores que ha tenido Canadá. Ahí está Kelly Olynyk, Tristan Thompson, Jamal Murray, entre otros más.

22 años en una de las ligas más competitivas

Vince Carter

No es común que un jugador dure tanto tiempo en la NBA por el talento y competencia que existe entre los basquetbolistas. Y menos, ver a alguien que cercano a los 40 años se mantenga en este nivel. Lo mejor, Vince lo logró hasta los 43 años. 

A los 22 años llegó a la NBA y se mantuvo durante 22 temporadas en las que promedió 16,7 puntos, 4,3 rebotes y 3,1 asistencias en un total de mil 541 partidos y 46 mil 367 minutos. Grandiosos números.

Se convirtió en el único jugador en jugar en cuatro décadas distintas, mientras que es el cuarto jugador con mayor edad en estar en la NBA, el primero en disputar más temporadas y el tercero con más partidos.

Ahora no sabemos si lo volveremos en las canchas, pero durante todo este tiempo forjó un legado que quedará para siempre en la historia de la mejor liga deportiva del planeta.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es