Con la temporada de la NCAA finalizada abruptamente, debido a la expansión del Coronavirus, los mejores prospectos del baloncesto universitario empiezan a declararse elegibles para el Draft 2020 de la NBA. Ahora le llegó el turno de nuestro análisis a Jordan Nwora, alero surgido de la Universidad de Louisville.
¿Quién es y cómo juega Nwora? Lo analizamos a continuación.
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Información personal
Jordan Nwora es un alero de 2,03 metros y 102 kilos, nacido el 9 de septiembre de 1998 en New York. Formado en el baloncesto de High School de la ciudad de Buffalo, pudo darse el gusto de representar a Nigeria (nacionalidad de su padre) en el último Mundial, disputando dos partidos y promediando 11 puntos y 3,5 rebotes en esos juegos.
En Louisville jugó tres temporadas. En la primera tuvo un rol limitado (5,7 puntos en 12 minutos), pero ha sido una de las máximas figuras de los Cardinals en los dos más recientes: promedió 17 puntos y 7,6 rebotes en la 2018-2019 y 18 tantos y 7,7 rebotes en la 2019-2020, siendo elegido al Quinteto Ideal de la fuerte conferencia ACC.
Fortalezas
Las condiciones físicas de Nwora son muy interesantes: tiene muy buena altura para su posición y es un correcto atleta, aún sin ser particularmente destacado en ese aspecto. Más allá de que la altura le permitía jugar de cuatro en Louisville, tiene todas las condiciones necesarias como para que el salto a la posición de alero no le resulte complicado.
Lo primero para resaltar del juego de Nwora es sin dudas su tiro externo. Tomó 7,4 triples por cada 40 minutos en la NCAA y anotó un excelente 39% de ellos. Su mecánica de tiro es ideal y saca el tiro con gran velocidad, ayudado por su estatura para ser capaz de lanzar por arriba de la marca.
Lo interesante es que Nwora no se limita a ser un tirador en situaciones de lanzar en parado: también lanza con mucha naturalidad y fluidez desde el drible.
El neoyorquino tiene un interesante manejo de balón para su altura y más allá de ser mayormente un tirador, es capaz de crear su propio tiro y llegar hasta el aro. Allí es apenas promedio como ejecutor, pero su toque es interesante.
A su vez saca una buena cantidad de faltas (5 libres por cada 40 minutos) y viene de superar el 80% en libres durante la 2019-2020.
Tiene buenos movimientos sin pelota y es explosivo a la hora de hundir el balón. Se trata de un jugador que puede dañar jugando con el balón en las manos o sin él.
Jordan Nwora with a poster dunk! pic.twitter.com/h8UPubuemc
— Disney Gary Clark (@Itamar1710) September 2, 2019
Defensivamente ofrece cierta versatilidad y presencia física, además de ser un excelente reboteador. De hecho, en la NCAA aseguró el tablero propio al ritmo de un pivote (20% de DRB%).
Debilidades
Uno de los problemas de Nwora pasa por su selección de tiro. Más allá de que muchas veces esa confianza es requerida en un tirador exitoso, podría tomar mejores decisiones en ese aspecto y no forzar lanzamientos al ritmo que lo hace.
A su vez, su tarea como generador de juego deja muchísimo que desear: promedió apenas 1,6 asistencias por 40 minutos en la NCAA, con una relación de casi el doble de pérdidas que de habilitaciones para sus compañeros (168 vs 95). Ofrece realmente muy poco en ofensiva, fuera de su capacidad anotadora.
Defensivamente, hay interrogantes sobre la posición que va a defender en la NBA: le falta agilidad lateral para marcar perimetrales veloces y no tiene la potencia física para mantenerse con internos.
En la 2019-2020 dejó apenas 8 tapas en 1.026 minutos en cancha. A pesar de su buena estatura, no es factor en ese aspecto.
Posición de Draft proyectada: Final 1° Ronda / 2° Ronda.
Comparación NBA: CJ Miles.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.