Cleveland Cavaliers 92 - 91 Indiana Pacers
No son días fáciles para Cleveland Cavaliers después de la partida de LeBron James a Los Angeles Lakers. Si bien la alegría no abunda en los Cavs, cada tanto hay algún motivo para sonreír en Ohio. La noche del miércoles fue uno de ellos: Cleveland consiguió su octavo triunfo en la temporada por 92 a 91 frente a Indiana Pacers en un desenlace agónico que tuvo a Larry Nance Jr. como protagonista.
Nance tuvo una noche maravillosa con 15 puntos, 16 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y un tapón, con un 50% de efectividad de cancha y fue determinante al encestar el último tiro del partido para darle el triunfo a los Cavs frente a los Pacers en un partido que, a 43 segundos del final, perdían por tres.
Después de un tiro de media distancia fallado por Rodney Hood, Nance le ganó la posición a Victor Oladipo y alcanzó a capturar la pelota con la mano derecha para encestarla y conseguir un triunfo in extremis que celebró toda el banquillo en el medio del Bankers Life Fieldhouse de Indiana.
Tras haber llegado a Cleveland en la temporada anterior y ser uno de los principales compañeros de LeBron James durante la postemporada, se afianzó en los Cavs aún saliendo desde el banquillo en una temporada en la que disputó 28 encuentros. Nance Jr promedia 8.1 puntos, 6.8 rebotes , 3 asistencias y 1.3 robos por partido.
Esta victoria sigue dejando a los Cavaliers decimoterceros del Este, pero les ayuda a acercarse a los Knicks a quienes ya tienen a solo un partido. Mientras, los Pacers finalizan una racha de siete victorias consecutivas pero mantienen su puesto en la Conferencia.
Washington Wizards 110 - 118 Atlanta Hawks
Trevor Ariza no pudo reestrenarse con los Washington Wizards con una victoria ya que los Hawks le arrebataron esa posibilidad tras una excepcional noche de John Collins que se fue a los 20 puntos y 13 rebotes.
Los Hawks remontaron el partido después de acabar perdiendo al descanso y fueron capaces de manterse firmes ante los constantes ataques de un Bradley Beal enchufado y que acabaría con 29 puntos y 10 rebotes.
En el último periodo los Hawks demostraron que tienen mimbres para ser un equipo peligroso de aquí a unos años. Bajo la dirección de Young y Lin, Atlanta supo cómo frenar la sangría anotadora que suponían Beal y Ariza (19 puntos) dotándole de balones a Collins dada la superioridad bajo los aros.
El experimento acabó saliendo a la perfección y no solo no perdieron el partido sino que aumentaron la diferencia respecto al tercer tiempo para sumar su séptima victoria y dejar de ser el peor equipo del Este.
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