Boston Celtics 114 - Dallas Mavericks 93
Estadísticas | Resumen
Después de la paliza y lluvia de triples que firmaron en Charlotte, los Mavericks volvieron a mostrarse blandos fuera de Dallas. Esta vez fue en Boston, 24 horas antes de cerrar un exigente back to back en Philadelphia ante dos de los equipos llamados a pelear hasta el final en el Oeste. A pesar de las numerosas bajas (Kyrie Irving, Marcus Morris, Baynes...), los Celtics no pasaron problemas para cosechar una cómoda victoria (la cuarta consecutiva en casa).
Un motivado Jayson Tatum (10 de sus 18 puntos totales en el primer cuarto), fue el encargado de abrir las primeras distancias. Un periodo inicial en el que llamó la atención la inclusión de Bradley Wanamaker en la rotación de Brad Stevens. El propio exjugador del Fenerbahçe fue el primero en mostrarse sorprendido. Con 8 puntos, 4 asistencias y 3 robos, firmó su mejor encuentro en la NBA.
Una competición en la que volvió a medirse con un Luka Doncic, rival en las últimas Euroligas. El ex del Real Madrid, inmerso en plena batalla por convertirse en titular del All Star Game, cuajó una de esas actuaciones que son ya marca de la casa. Tampoco para tirar cohetes, pero fue de los más destacados en unos Mavericks cuyo desacierto en el lanzamiento (234/88 en tiros de campo y un 11/44 en triples) les condenó. Doncic acabó con 19 tantos (4/8 desde más allá del arco), 9 rebotes, 4 asistencias y 3 pérdidas en casi 29 minutos en los que registró un +3.
En el primer encuentro de su carrera en Boston, Luka fue el principal culpable de que los Celtics no se fuesen ya al descanso con el triunfo en el bolsillo (58-51). Cerró un 5-15 de parcial previo al paso por vestuarios con un espectacular triple sobre la bocina. Su cierre a una buena primera mitad y su sello a la afición de un Garden especialmente cariñosa y volcada con Dirk Nowitzki.
Luka banks in a buzzer beater. #NBARooks pic.twitter.com/OEvNiuTV9S
— NBA Draft (@NBADraft) 5 de enero de 2019
Dirk Nowitzki no superó el récord de Kobe
El alemán recibió la ovación del pabellón nada más que saltó al parqué y su presencia fue reclamada con insistencia a lo largo de la noche. El motivo, tenía la posibilidad de convertirse en el jugador de la Conferencia Oeste con más puntos anotados en el Garden. Con 426, se encontraba a sólo uno de los 427 de Kobe Bryant, el mayor archienemigo de los verdes en la NBA moderna junto a LeBron James. El alemán lo intentó con saciedad hasta, literalmente, el último segundo. Pero se fue con un rosco (0/10 en tiros) que le dejó sin el récord.
Everyone at TD Garden wanted Dirk to hit a 3, but he fell just short 😂 pic.twitter.com/JmwnXouog2
— Bleacher Report (@BleacherReport) 5 de enero de 2019
La anécdota de un encuentro en el que Jaylen Brown se fue hasta los 21 tantos y un gran Gordon Hayward rozó el triple-doble (16+11+8). Un triunfo coral de los Celtics que vuelve a dejar a los Mavs como el peor equipo visitante de la NBA (3-17).