En apenas unos segundos todo puede venirse abajo. El camino recorrido y el trabajo realizado pareció desvanecerse en apenas unos instantes para los Milwaukee Bucks. Mediado el tercer cuarto en una acción fortuita, Giannis Antetokounmpo experimentó una mala caída que le produjo una hiperextensión de la rodilla izquierda que le dejó no solo tendido en el suelo retorciéndose de dolor, sino que puso en cuestión toda la campaña que los de Wisconsin venían realizando. Tal fue el impacto que tuvo el infortunio en el equipo que cortó de raíz todo intento de remontada durante el Game 4, el cual se acabaron llevando los Atlanta Hawks por 110 a 88 en un duelo donde tampoco estuvo Trae Young.
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Las lesiones forman parte del deporte, no pueden eliminarse y siempre estarán ahí, más en aquellas que no se pueden prever ni prevenir como las producidas por lances del propio juego. Lo más importante para un grupo en estas circunstancias es saber sobreponerse, encontrar el modo de dejar atrás lo ocurrido o bien usarlo como combustible. Milwaukee no tiene margen para el error ya que, con 2-2 en la serie y con una oportunidad única ante sí, han de hacer prevalecer su condición de favoritos.
Las dudas acerca de si la lesión experimentada por el jugador griego es o no de gravedad son legítimas, pero el modo en el que su rodilla contactó con el suelo no invita al optimismo, más teniendo en cuenta el poco tiempo que hay de descanso entre partido y partido. En lo inmediato, los Bucks tendrán que afrontar cómo sacarán adelante el decisivo Game 5 con la más que posible ausencia de Antetokounmpo, quien será examinado a lo largo del miércoles. Según publicó Adrian Wojnarowski, el jugador de los Bucks no sufrió daño estructural en la rodilla, pero su tiempo de regreso no está claro.
There is no structural damage to Giannis Antetokounmpo's left knee after his awkward landing last night in Atlanta; ligaments are sound, sources tell @ZachLowe_NBA and me. Timetable to return is unclear.
— Adrian Wojnarowski (@wojespn) June 30, 2021
El balance del equipo en esta pasada Fase Regular sin el griego ha sido de 6 victorias y 5 derrotas, sucediendo 4 de esas 5 caídas por menos de 10 puntos, lo que asegura al menos igualdad en el choque pese a las diferencias de contexto.
En caso de que finalmente Giannis quede descartado no solo para el quinto partido sino para el resto de los Playoffs, ¿cómo impactaría esto en los Bucks? ¿Serán capaces de sobreponerse y cerrar la serie para volver a las Finales 47 años después? Así les afectaría.
Sistema defensivo
Una de las principales razones por las que los de Budenholzer lograron ponerse 2-1 arriba frente a Atlanta fue gracias al increíble paso adelante que experimentaron en defensa. La clave de la mejoría respecto al primer partido fue mayúscula, pasando de encajar 116 puntos a 91 y 102 en los dos siguientes compromisos. Unos resultados que, entre otros, tuvo como responsable a Antetokounmpo.
El griego ha sido la punta de lanza de la defensa de los Bucks durante todos los Playoffs, algo que no debería sorprender a nadie a estas alturas, pero lo que le ha diferenciado con respecto a otras figuras determinantes en este costado ha sido su rol, pues el ala-pívot no se ha centrado en funciones de stopper clásico, es decir, centrado en el 1 contra 1, sino más bien en las ayudas, en la protección colectiva del aro y en la intimidación. No nos engañemos, Giannis es un excelente jugador en la defensa puramente individual, permitiendo tan solo el 43,1% de los intentos rivales, pero ha sido aún más importante cuando se ha encargado de actuar en la lectura defensiva sobre la bola, teniendo un 101,8 de defensive rating, el más alto en todos los Playoffs.
Para que nos hagamos una idea del impacto defensivo que Antetokounmpo tiene en los Bucks es preciso destacar que ha conseguido 1,3 defensive win shares, una métrica destinada a medir cuánto afecta alguien con su defensa en los resultados del equipo. Este dato, además de ser el más alto de todos los Playoffs actuales, es el más alto que se ha registrado desde Kawhi Leonard en 2019 cuando logró ser campeón ante Warriors.
Afortunadamente para Milwaukee, estos siguen contando con tres jugadores de pura élite en este costado del campo como son Khris Middleton, Jrue Holiday y PJ Tucker, pero los tres lo son en el apartado puramente individual, solo Giannis es capaz de brillar y rendir a un nivel tan alto en el trabajo colectivo, haciendo de él alguien insustituible. Aquí es donde la figura de Brook Lopez gana importancia, algo que quedó claro en el Game 2, donde su labor protegiendo el aro sobre Trae Young le llevó a finalizar con 9 pérdidas y que se ha destacado como alguien clave.
El alma del ataque
Si hubo un factor que hizo posible que Milwaukee se convirtiese en la potencia que es a día de hoy no fue solamente por la presencia de Giannis Antetokounmpo, un jugador generacional, sino por la intención de hacer del griego el eje de su ataque. En el momento en el que el uso del ala-pívot con balón comenzó a aumentar, los resultados del equipo mejoraron, iniciando así un proceso en el que ambas partes se retroalimentaban en un ciclo sin fin.
El dos veces MVP puede parecer a simple vista un jugador limitado técnicamente, el cual carece de tiro exterior y es sumamente vertical, pero basta poner toda la atención en él durante un partido para darse cuenta que su papel en los Bucks va más allá de las acciones más vistosas. Antetokounmpo es el principal creador de juego en cancha pues a través de sus manos a manos, pantallas y movimiento sin balón este consigue que todo el sistema de Budenholzer tenga sentido.
De hecho, en el momento en el que durante estos Playoffs Antetokounmpo pasó de ser creador con la pelota a generador de juego sin ella Milwaukee comenzó a funcionar a pleno rendimiento y a sumar grandes victorias. Es su trabajo más oscuro el que ha acabado siendo más valioso para el equipo, siendo el tercer jugador que más puntos ha logrado generar gracias a sus bloqueos entre aquellos que todavía siguen en la postemporada, produciendo 8,1 y siendo superado únicamente por Deandre Ayton (12,2) y Clint Capela (12,9), ambos interiores clásicos.
El nivel al que venía jugando el griego ante los Hawks queda claro viendo los números que habían registrado sus principales defensores a la hora de medirse cara a cara con él. Clint Capela, su emparejamiento más común, tan solo ha podido dejarle en un 50% de acierto en tiros de campo, lo que descontando los triples ascendería a un 57% de efectividad en lanzamientos de 2 puntos. Por otro lado, Giannis venía resultando absolutamente imposible de detener en la pintura, logrando anotar 20,1 puntos en este espacio, el número más alto en los Playoffs desde Shaquille O'Neal (21,6) en 2001.
Los Bucks van a necesitar encontrar en secundarios como Bobby Portis o Bryn Forbes un extra para descargar de presión anotadora a Khris Middleton y Jrue Holiday, que deberán mantener sobre sus hombros un sistema pensado y confeccionado para exprimir las virtudes de Antetokounmpo y que sin él puede no ser igual de eficiente.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.