Los Angeles Clippers 100 - 121 Denver Nuggets
No dieron opción alguna. Los Nuggets, liderados por Nikola Jokic (18 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias), han superado con sencillez a los Clippers, otro de los equipos revelación de la temporada con un baloncesto puro y haciendo honor al estilo del que llevan haciendo gala toda esta campaña. Una noche en la que Jokic volvió a convertirse en el dueño y señor del balón y el juego, dotando de balones a sus compañeros, de los que los más beneficiados fueron Jamal Murray con 23 puntos, Malik Beasley con 15 o Torrey Craig con 14.
En otra noche en la que tuvieron que salir sin Harris, los Nuggets solventaron la papeleta por la vía rápida, con un parcial tremendo en su inicio que condenaría a los Clippers el resto del partido. Unos Clippers a los que les costó enormemente seguir el ritmo del encuentro y donde el primero en tratar de levantar al equipo fue Gallinari, que acabaría con 18 puntos. El mejor de los Clippers volvería a ser Lou Williams con 19 en una noche discreta.
Los Clippers comenzaron compitiendo, un buen parcial les dejaba dentro de la lucha por la victoria, pero todavía quedaban más de 40 minutos. Fue entonces cuando Beasley comenzó a masacrar a los Clippers. Una inmaculada serie desde el tiro sorprendió a la defensa de Rivers y desató una sangría que acabó con el colapso del equipo minutos más tarde. Esto se tradujo en un parcial de 25 a 37 con la sensación de que podría haber sido más la diferencia.
Denver se mantuvo en el segundo cuarto pese a la entrada de Williams y Gallinari, que no fueron capaces de darle la vuelta al partido. Jokic dominaba todas las fases del juego y Harrell y Gortat no podía anticipar sus movimientos. Tras el descanso los Nuggets consiguieron abrir una pequeña brecha aprovechando las rotaciones del partido, una diferencia que sería mortal para los Clippers y se traduciría en una desventaja que por momentos superaría los 20 hasta el pitido final.