Poco ha quedado de aquellos Philadelphia 76ers sólidos del principio de la temporada. Más allá de alguna buena actuación como la que venían de tener ante un Dallas disminuido (sin Porzingis), lo cierto es que los de Doc Rivers están atravesando un mal momento en el torneo, que tras su caída de este domingo en prórroga ante Cleveland por 112-109, los ha puesto con marca de 4-5 en sus últimas nueve presentaciones. Si bien la punta del Este todavía les pertenece gracias a la derrota de Brooklyn, en los Sixers están quedando expuestas algunas debilidades claras y trascendentes.
Los Cavs dominaron la mayor parte del tiempo regular, golpeando en la primera mitad (56-47) ante un Philadelphia con desconcentraciones defensivas. Los locales salieron con otro enfoque al segundo tiempo y secaron a Cleveland (solo 40 puntos en la segunda mitad), pero fueron incapaces de tomar el control del partido debido a lo que poco certeros que estuvieron en ofensiva, sacando a un Joel Embiid dominante. El propio camerunés tuvo un intento para ganar el partido en el cierre del último cuarto, pero su tiro a media distancia no ingresó y nos fuimos a la prórroga.
Sexton gives the @cavs a five-point lead in OT! 🙌🙌#BeTheFight | @CollinSexton02 pic.twitter.com/dbNMPPzfqG
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Allí los Cavaliers fueron claramente superiores, ante unos 76ers demasiado dependientes de lo que hicieron Embiid. Darius Garland calentó la mano (11 puntos) y en los Sixers no apareció ninguna segunda figura que acompañara a su pívot (anotó 12 de las 17 unidades de los suyos), dejando la victoria en manos de la visita, por una diferencia real más amplia de lo que terminó indicando el marcador final (Ben Simmons anotó un triple sobre la bocina).
La ofensiva de Cleveland, que sumó este domingo su tercera victoria seguida, estuvo liderada como de costumbre por la tarea de Collin Sexton (28 puntos) y Darius Garland (25 puntos), mientras que también hubo aportes interesantes del novato Isaac Okoro (15 puntos, 8 rebotes, 3 robos, 6-9 de campo) y de un Jarrett Allen (14 puntos y 10 rebotes) que tuvo que lidiar con Embiid en la pintura propia.
El pívot de los Sixers fue el máximo anotador del encuentro y la única razón por la cual su equipo llegó siquiera al tiempo extra: 42 puntos, 13 rebotes, 6 asistestencias, 2 tapones, 1 robo, 13-22 de cancha, 14-16 en libres. Otra vez, con números de MVP. Entre sus compañeros, el único que pasó de los 11 tantos fue Ben Simmons con 24, junto a 8 asistencias y 7 rebotes.
JOEL EMBIID DOING WHAT NOW!? 🤯 pic.twitter.com/GXsrdP3XGB
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El encuentro sacó a la luz varios problemas que los 76ers están encontrando en este momento. Uno de ellos pasa por la defensa en transición: Philadelphia es el equipo que más puntos en contragolpe recibe de toda la NBA (16) y Cleveland explotó eso al máximo esta noche, sobre todo de la mano de Sexton. Los Cavs anotaron ¡26 puntos en transición! Corrieron la cancha una y otra vez ante un rival demasiado lento para esos regresos, en un déficit que se repite en los de Rivers partido a partido.
Garland to Sexton. It's a beautiful thing. 😍
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Otro defecto que salta a la vista es el mal rendimiento de la segunda unidad Sixer. Shake Milton ha bajado mucho su nivel, Matisse Thybulle es clave en defensa pero no tiene aporte alguno en ataque, mientras que el resto sigue en un nivel muy bajo. Sobre todo la dupla interior, con un Dwight Howard y Mike Scott de poco aporte. La dependencia de Embiid en este equipo es total: sin contar lo de esta noche, Philadelphia tiene un Net Rating de +10,3 con su figura en cancha, pero de -8,6 cuando este descansa. Y ante Cleveland no hubo cambios en ese sentido, registrando un +5 en los 40 minutos de Embiid y un -8 en los 10 que descansó. ¿Harán movimientos antes de la fecha límite de traspasos? Parecen necesarios.
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El tercer problema es aún más preocupante para los 76ers, pensando en los Playoffs: su falta de opciones en el clutch. Más allá de que han ganado muchos partidos cerrados en esta temporada, está claro que al equipo le faltan recursos en esos pasajes. De nuevo, si no es Embiid, no hay alternativas confiables para generar puntos por su cuenta, sin contar con ese exterior creativo que tienen la mayoría de los equipos. Tobias Harris (ausente esta noche) puede asumir algo de esa responsabilidad, pero está lejos de ser un especialista, mientras que el bajón de Simmons en los cierres es notorio.
El australiano pierde todo tipo de agresividad en esos finales, limitándose a empujar la bola hasta el campo de ataque y luego desentiéndose, a la espera de lo que puedan hacer sus compañeros. Demasiado intrascendente para un All-Star de su talento. En algunos partidos de esta campaña ese rol de generador lo asumió Seth Curry, pero esta noche no fue el caso, con el ex de Dallas lanzando un 1-13 de cancha y fallando varios lanzamientos decisivos.
Aunque su récord y posición diga lo contrario, los Sixers tienen varios temas por los cuales preocuparse y ocuparse en las próximas semanas. Confiar en exactamente este mismo plantel para la postemporada, simplemente por su buen registro en lo que llevamos de Fase Regular, puede ser un error que les cueste caro ante rivales de calidad como los que deberán superar en el Este.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.