Los Angeles Lakers 129 - 128 Boston Celtics
La rivalidad entre Boston y los Lakers siempre ha sido algo más. Un enfrentamiento que ha ido más allá del baloncesto. El choque de dos ciudades y dos culturas representadas por dos equipos de baloncesto. La llegada de James e Irving ha servido en bandeja a los aficionados una nueva reedición de este fenomenal partido que parece indicar una nueva edad de oro del partido NBA por excelencia. En la noche de hoy, durante la primera visita de LeBron James al TD Garden como Laker el de Ohio no ha decepcionado. 28 puntos, 12 rebotes y 12 asistencias para someter a los verdes en un encuentro que se decidió en el último segundo con una canasta del ex-celtic Rajon Rondo.
👑 @KingJames (28 PTS, 12 REB, 12 AST) notches his 4th triple-double of the season to help the @Lakers prevail in Boston! #LakeShow pic.twitter.com/8ges57rBRd
— NBA (@NBA) 8 de febrero de 2019
En una noche en la que se anunciaron las elecciones de los equipos del All-Star y se supo que LeBron compartirá pista con Irving y Davis, los Celtics tenían en su mano alargar su buena racha ante unos Lakers a priori descompuestos tras el deadline y sin rumbo aparente. Kyrie Irving lideró a los verdes con 24 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias en una noche aciaga en el lanzamiento (6 de 21) en una contienda donde Jaylen Brown (18 puntos) y Jayson Tatum (22 puntos y 10 rebotes) sostuvieron a los Celtics.
"La presión sobre nosotros nunca fue tan grande", decía Stevens en unas declaraciones recogidas por Tom Westerholm. "Tenemos que progresar en lo que somos. Nos gusta nuestro grupo, tenemos todo el tiempo del mundo, no fuimos perfectos al principio, no lo somos ahora, pero estamos progresando, por lo que eso es realmente alentador", finalizaba.
What a sequence by LeBron!!#LakeShow (📺: @SpectrumSN & TNT) pic.twitter.com/aQhYHf5W0m
— Los Angeles Lakers (@Lakers) 8 de febrero de 2019
Una derrota que por momentos pareció inesperada debido al control del partido por parte de los Celtics, que se repusieron a un 42-27 en el tercer cuarto, manteniendo a los Lakers a raya y con una defensa sobre LeBron James que impidió que este anotase la canasta final. Pero James es mucho James y dominó a placer durante todas las fases del juego y fue capaz de involucrar a todos sus compañeros. Prueba de ello es el gran partido que hizo la segunda unidad con Chandler, Cadwell-Pope y Stephenson a la cabeza, siendo el pivot una figura fundamental en la victoria.
La figura de LeBron fue clave en el tercer cuarto, repartiendo 6 asistencias para que los Lakers remontasen un -13 y mandasen en el marcador. Fue ahí donde Rozier y Theis dieron un paso adelante para reenganchar a los verdes en el partido con un parcial que les colocaba por delante. Irving dio consistencia al equipo a falta de 3 minutos para el final y el partido parecía controlado, pero Ingram era taponado por Horford a falta de 3 segundos, Rondo capturaba el rebote e in extremis anotaba la suspensión que daba la victoria a los Lakers.
Tenía que ser precisamente un ex-celtic quien diese la victoria a los Lakers y precisamente Rajon Rondo. Un final agónico para un partido más típico de playoff que regular season.