Renee Montgomery: de base a propietaria en la WNBA, con el foco en la justicia social

Author Photo
Renee Montgomery

El equipo de baloncesto femenino de la Universidad de Connecticut es el más exitoso de Estados Unidos: desde allí en las últimas décadas se han promovido a la WNBA a cracks como Breanna Stewart, Diana Taurasi, Maya Moore, Sue Bird, Rebecca Lobo, Swin Cash y Tina Charles.

En ese equipo en el año 2009 brilló una joven de 22 años nativa del oeste de West Virginia que medía 1,70 metro pero que se las arreglaba para hacer enloquecer a las defensas rivales desde la base, llevando junto a Moore y Charles a las Huskies de Connecticut a una temporada perfecta de 39-0 y al título nacional. ¿Su nombre? Renee Montgomery. Ella llegó a la WNBA en el 2009 y hace unas semanas decidió cerrar su etapa como jugadora profesional, aunque su último partido en realidad data de 2019. Y aunque sus pergaminos en la liga estadounidense no sean tan enormes como los de otras dirigidas por Geno Auriemma, su importancia histórica y su influencia no paran de crecer.

Renee Montgomery

Montgomery forma parte del grupo de nuevos propietarios de Atlanta Dream, con un porcentaje minoritario, y es la primera ex jugadora en la historia de la WNBA en tener un porcentaje de propiedad de una franquicia de la liga. Esta acción se trata de una más de las tantas en las que Montgomery continúa traspasando barreras de género y raza, algo que tiene claro que no la detendrá pero que también busca que no frene a otras personas.

MÁS | Los premios de mitad de la temporada NBA 2020-2021: ¿Quién ha sido el MVP, Mejor Rookie, Defensor y más?

"Mi sueño se hizo realidad, romper barreras para las mujeres y los grupos minoritarios siendo la primera ex jugadora de la WNBA en tener acciones de una franquicia y un rol de liderazgo en el equipo es una oportunidad que me tomo muy seriamente", afirmó Montgomery al conocerse la noticia a fines de febrero. Ella tendrá un rol importante en la toma de decisiones de la franquicia y será la embajadora del nuevo grupo propietario (liderado por Larry Gottesdiener y Suzanne Abair) ante los medios y los fanáticos, mientras que otra mujer afroamericana como Brooklyn Cartwright, nativa de Atlanta, es la nueva directora de operaciones deportivas de Atlanta Dream.

"Entusiasma ver representación en cualquier tipo de nivel ejecutivo. Es algo entusiasmante y hay muchas charlas sobre eso entre los jugadores y sobre lo que significaría para un jugador estar en esa posición. Entonces reconozco que esta es una oportunidad no solamente para mí sino para todo el grupo de jugadores, sean mujeres o hombres, de vernos de forma diferente, con una luz diferente", también manifestó Montgomery en otro capítulo más del movimiento de empoderamiento de los jugadores.

El plantel de Atlanta Dream tomó una fuerte postura política el año pasado, oponiéndose a la ex senadora por Georgia Kelly Loeffler, entonces propietaria de la franquicia y ocupando una banca en el parlamento. En medio del clima de crisis del año pasado, Renee fue una de las jugadoras que decidió no participar de la temporada 2020 de la WNBA. "Hay trabajo para hacer fuera de la cancha en tantas áreas de nuestra comunidad. La reforma de la justicia social no sucederá en una noche, pero siento que ahora es el momento", justificó su decisión.

MÁS | WNBA, la liga norteamericana líder en diversidad

Así Montgomery terminó finalizando en 2019 su exitosa carrera en la que logró dos títulos de la WNBA en 2015 y 2017 jugando para Minnesota Lynx como base suplente y en la que fue elegida para el All-Star de 2011 como miembro de Connecticut Sun, misma franquicia con la que ganó el premio de mejor Sexta Mujer en la temporada 2012 promediando 11,6 puntos y 2,6 asistencias en 24 minutos por partido. En total disputó 364 partidos en la WNBA y también pasó por las ligas de Lituania, Israel, Rusia, Australia y Polonia.

Su impacto igualmente no debe ser reducido a los números y los logros deportivos. Montgomery en el 2019 inauguró la Fundación Renee Montgomery como una iniciativa para "esforzarse en promocionar el amor, la positividad y la igualdad para todos" y forma parte de los grupos "More Than a Vote" que busca promocionar la participación política de las comunidades afroamericanas y combatir la supresión sistémica de votantes y "Last Yard", que apoya el crecimiento educativo de los HBCU (universidades y colleges históricamente negros). "Si sientes que debes dar un paso, entonces hazlo. No hay mejor clima que el de ahora para que los atletas sean activistas", manifestó.

Además, Renee es de las primeras jugadoras profesionales en tener un lugar como analista de televisión en las transmisiones de los partidos de la NBA, formando parte a tiempo completo del equipo de Fox Sports Southeast que retransmite los encuentros de Atlanta Hawks junto a otros nombres legendarios de la NBA como Vince Carter o Dominique Wilkins. Otro acto de dejar una huella marcada que podrá ser tomada como ejemplo y guía por las siguentes generaciones.

En su nuevo rol en las oficinas de una franquicia ella no tiene a nadie en quién reflejarse, sino que una vez más deberá ir abriéndose camino en afan de lograr su objetivo de que Atlanta Dream se convierta en una franquicia que sea un destino top para el resto de las jugadoras, uno que las agentes libres no podrán rechazar. Las Dream todavía no lograron conseguir un campeonato en 13 años de historia, habiendo perdido las Finales de la WNBA en 2010, 2011 y 2013, por lo que el objetivo deportivo es interesante junto al comunitario siendo la principal organización deportiva femenina en una de las ciudades más grandes de Estados Unidos. Ahí es donde Renee intentará conducir de nuevo hasta la corona.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Agustín Aboy Photo

Agustín es productor de contenidos para Sporting News.