Shawn Bradley dio a conocer hoy los primeros detalles públicos del accidente que sufrió el 20 de enero de 2021. El ex-jugador NBA, de 2,29 de estatura y que fue parte de Dallas Mavericks (entre otros), fue golpeado por detrás por un coche mientras iba con su bicicleta cerca de su casa en St. George, Utah. El accidente provocó una lesión traumática de la médula espinal que lo dejó parapléjico. Después de someterse a una cirugía en el cuello, el interior ha pasado las últimas ocho semanas hospitalizado y sometido a rehabilitación.
Bradley, un devoto miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, pasó dos años realizando una misión religiosa en Australia después de completar su primer año en la Universidad Brigham Young. Tras esto, fue seleccionado por los Philadelphia 76ers con el pick número 2 en el Draft de la NBA de 1993, pero pasó la mayor parte de su carrera con los Dallas Mavericks.
Su fuerte sentido de la fe está siendo puesto a prueba mientras participa en una extenuante fisioterapia y aprende a afrontar los desafíos de la paraplejía. Los médicos le han comunicado que su camino hacia la recuperación será largo y complicado, quizás un desafío físico aún más difícil que jugar baloncesto profesional.
Con su esposa Carrie a su lado las 24 horas del día y con el apoyo de un increíble equipo de especialistas en rehabilitación y familiares, Bradley está de buen humor. Planea utilizar su accidente como una plataforma para crear una mayor conciencia pública sobre la importancia de la seguridad de los ciclistas.
Bradley pidió transmitir su profundo agradecimiento por la gran cantidad de buenos deseos y oraciones que ha recibido de familiares, amigos y fans. Su apoyo ha facilitado su recuperación y ha reforzado su confianza en el largo proceso que tiene por delante. No planea realizar más actualizaciones públicas, prefiriendo dedicar toda su concentración a su rehabilitación.
“Nos entristece saber del accidente de Shawn. Siempre ha sido increíblemente determinado y ha mostrado un espíritu de lucha. Le deseamos lo mejor en su recuperación. Siempre será parte de nuestra familia de los Mavs", dijo Mark Cuban, dueño del equipo.
“Nos entristece profundamente escuchar sobre la lesión de Shawn y nuestros pensamientos y oraciones están con él y su familia", añadió Donnie Nelson, general manager de la franquicia. "En sus más de ocho temporadas en Dallas, Shawn demostró todas las cualidades que desea en una persona que representa a su organización. Siempre ha mostrado un valor y una determinación inquebrantables y estamos pensando en él en este momento difícil. Es un Maverick de por vida".
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.