Houston Rockets 118 - 112 Golden State Warriors
La baja de última hora por dolor en el cuello de James Harden hacía presagiar un paseo para los Golden State Warriors que acumulaban 5 triunfos consecutivos en casa. Los Rockets tendrían que verse las caras contra el mejor equipo del país sin su mejor jugador, pero de la nada surgió un esfuerzo colectivo sin precedentes que aupó a los de D'Antoni hacia la victoria.
Las razones de la ausencia del All-Star las dió su entrenador al finalizar el encuentro: "Él podría haber jugado incluso con el cuello dolorido. Tenía un pequeño brote de la gripe. Fue una combinación de todo".
👀 @CP3 walks off with the W and 9,000+ career assists! #PhantomCam #Rockets pic.twitter.com/FeLC26vtxm
— NBA (@NBA) 24 de febrero de 2019
Una noche en la que todo salió a las mil maravillas y no se echó de menos al bueno de Harden, sumando la tercera victoria contra los Warriors en este curso (3-0) antes del último partido de fase regular entre ambos equipos que se disputará en Houston el próximo 13 de marzo. Esta derrota de los Warriors supone el primer tropiezo desde que se alinean como titulares a Curry, Cousins, Durant, Thompson y Green. Precisamente Draymond Green no terminaría el encuentro ya que abandonó el partido con una torcedura de tobillo al inicio el cuarto tiempo y siendo un duro golpe para los suyos.
Eric Gordon fue el mejor sustituto de Harden con 25 puntos, convirtiéndose en el máximo anotador de los Rockets, pero realmente la clave residió en que 5 jugadores superaron la barrera de los 10 puntos y Chris Paul fue el líder en un partido muy especial. Con sus 23 puntos, 5 rebotes y 17 asistencias el base de Houston alcanzó las 9000 asistencias en su carrera. Algo que él mismo definió como "un honor y un privilegio". "Cuando recibes ayuda, tengo la parte fácil. Simplemente paso ", dijo. "El resto son los que tienen que hacer los tiros".
👏 @TheofficialEG10 (25 PTS) & @KennethFaried35 (20 PTS, 10 REB) combine for 45 in the @HoustonRockets victory! #Rockets pic.twitter.com/SOmPJ73b3Z
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Los Rockets salieron a por todas en la primera mitad, con un Capela ansioso por demostrar que estaba recuperado y Paul dirigiendo todo el entramado ofensivo. Rápidamente los Rockets tomaron una ventaja que se materializó en un 35-20 al primer cuarto. Eric Gordon y PJ Tucker reconvertido en alero fueron las alas de Houston. Golden State renacería por medio de los triples de Curry y pondría remedio a la situación, dejando todo por resolver en la segunda mitad.
Sería entonces cuando Durant tomase las riendas de los Warriors hasta acabar con 29 puntos en una actuación magnífica, pero la lesión de Green complicaría todo. Esto unido al rendimiento de Cousins, el cual acabaría con 6 pérdidas, acabaría por perjudicar a los de Kerr. Paul y Gordon aguantaron el vendabal y condujeron a la victoria a Houston en una excepcional exhibición defensiva por parte de los Rockets.
16th made 3 for the squad! 🔥🔥🔥 pic.twitter.com/5cAhqBB6uC
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Un triunfo que al venerado Paul no le importa en absoluto. "Puedes venir aquí y ganar un lunes por la noche en febrero o un martes por la noche en noviembre o diciembre", comentaba Paul. "Pero en los playoffs es cuando tienes que vencer a un equipo cuatro de siete veces. Es genial esta noche, pero en dos días todos lo olvidaremos", sentenciaba CP3.
Los Rockets volverán a la acción el lunes contra Hawks y los Warriors esa misma noche contra los Hornets mientras se espera que la lesión de Green no revista gravedad.