Sin jugar desde marzo hasta ¿diciembre? El nuevo calendario de la NBA una vez ha sido aprobado el regreso de la 2019-2020 es todavía difuso. Hay fechas marcadas e intenciones de dar comienzo a la 2020-2021 en Navidad. Esto implicaría que estrellas como Stephen Curry, Trae Young o Karl Towns estarán sin partidos hasta diciembre. Y en ese grupo de jugadores se incluyen dos españoles.
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Willy y Juancho Hernangómez dan sus temporadas por concluidas. Los Charlotte Hornets cierran con un récord de 23-42, 10º del Este y a 1,5 partidos de los Wizards, equipo que sí estará en el torneo de Orlando. Mientras, Minnesota Timberwolves vivió un importante cierre del mercado de traspasos en febrero que replanteó la plantilla y su núcleo: 19 victorias y 45 derrotas, 14º del Oeste, tercer peor equipo de la NBA.
En clave personal, la 2019-2020 ha sido una temporada que comenzó con ilusión para ambos tras el oro del Mundial de China y las ganas de reivindicarse. El tramo inicial estuvo lleno de desconciertos por sus entradas y salidas de las rotaciones, encuentros sin jugar y dudas al largo plazo. Tras esto, el traspaso para Juancho y los minutos para Willy dibujaron un mejor cierre de curso.
¿Qué supone el final de la temporada para Willy y Juancho?
Willy ha ido perdiendo minutos cada temporada. El notable año rookie en los Knicks dio paso a menos minutos y su traspaso a un equipo que contaba con varios jugadores en su posición, además de una necesidad más urgente de ganar ante una posible marcha de Kemba Walker. Por eso cuesta entender que haya recibido menos tiempo en la 2019-2020 sin Kemba que en la 2018-2019 con el base.
James Borrego utilizó a Cody Zeller y a Bismack Biyombo por delante del español durante las primeras semanas de competición. La irrupción de PJ Washington, rookie interesante, y su uso de cinco abierto ofensivo tampoco ayudan a Willy. Aunque a comienzos de 2020, Borrego optó por aumentar los minutos de Hernangómez, y los resultados fueron positivos.
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Entre el 10 de enero y el 7 de marzo, Willy tiene el papel de pívot suplente y cumple con 8,3 puntos, 5,7 rebotes y 1,3 asistencias en 16 minutos. Un acierto del 57% en tiros de campo y 67% en tiros libres, prácticamente sin intentar triples (21%). Los problemas defensivos siguen ahí, aunque en varios partidos ha ofrecido una mejor cara y cierto control del rebote defensivo para Charlotte.
Durante estos 19 encuentros con minutos y peso real en la rotación, Willy intercaló cuatro encuentros en los que se quedó fuera por decisión técnica, junto a los dos últimos partidos de los Hornets, en los que tampoco participó. La tendencia era positiva y parecía que Borrego había decidido incluirle en su reparto principal de minutos, al menos hasta que la temporada terminase. Willy podría haber terminado la 2019-2020 acumulando el mayor promedio de minutos en la NBA desde su año rookie.
El traspaso por Jerami Grant fue el último movimiento. Cada verano Juancho veía a los Nuggets añadir piezas de calidad a los huecos que él estaba destinado a ocupar. Denver no ha hecho una buena gestión ni en su caso ni en el de Malik Beasley. Ambos primeras rondas del Draft de 2016, juegan a tramos, muestran su valía en la NBA actual y, ante una plantilla demasiado profunda, salen muy baratos para Minnesota.
Los Wolves consiguen una pareja que a priori será importante para sus planes a medio plazo. Encajan con la idea de juego que implementan en la enésima reconstrucción y entre ellos son complementarios. Chapó por Minnesota, Gersson Rosas y los movimientos de febrero. Menos para Denver, que ha tenido varias perlas jóvenes en su plantilla sin poder replicar el mismo trabajo con todas ellas. Al menos dieron una buena salida tanto para Juancho como para Malik.
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Después de 34 partidos y 12,4 minutos por noche, la cifra más baja de su carrera, Juancho llega a Minnesota y es titular. Acumula entonces el mejor tramo de sus cuatro años en la NBA: 12,9 puntos, 7,3 rebotes, 1,3 asistencias y 1 robo en 29,4 minutos. Todo ello con un 45% en tiros de campo, un 42% en triples lanzando 4,9 por partido y 60% en libres.
Juancho pierde la oportunidad de jugar más minutos con su nuevo equipo y compañeros, en especial D'Angelo Russell, Karl Towns, Josh Okogie y Jarrett Culver. Este grupo de cuatro más Hernangómez y Beasley se presume como el núcleo para años venideros. Hubiese sido interesante para la franquicia verles durante unas semanas más juntos, aunque tampoco debería cambiar sus planes el disputar o no 18 encuentros.
Willy y Juancho terminan contrato
El timing del parón es malo para todos, pero siempre hay unos que consiguen un extra y otros que pierden. De hecho, el formato de regreso de la 2019-2020 beneficia a equipos que no fuesen a tener factor cancha en Playoffs y penaliza a los que iban a tenerlo. En este caso, el cierre llega cuando ambos jugadores, los dos hermanos, buscarán firmar su segundo contrato en la NBA.
Siempre se dice que es ese segundo contrato el que vale. La mayoría de jugadores tienen un primer contrato bajo al ser elegidos en el Draft, por lo que tras demostrar su valía pueden conseguir cifras más suculentas en su segunda firma. Es el caso de ambos, aunque las situaciones son diferentes.
Willy tiene la situación más complicada de los dos. La NBA actual penaliza a los pívots de juego de espaldas, faceta en la que el exjugador del Real Madrid siempre ha destacado. Sus problemas defensivos y la falta de tiro exterior suponen dos losas importantes en su continuidad en la liga. Tiene su rol y puede cumplirlo, sin duda, pero su abanico de minutos se ve limitado por estos dos aspectos.
El mayor de los Hernangómez termina un contrato de cuatro años de segunda ronda por el que percibía en la 2019-2020 una cifra aproximada de 1,7 millones ($1,676,735) sin impuestos y sin las pérdidas que pueda ocasionar el parón. Charlotte es un buen lugar para seguir jugando y convencer a Borrego de que puede darle minutos, aunque dependerá en buena parte de lo que suceda en la lotería del Draft. El parón no hace si no aumentar la incertidumbre sobre su futuro en la mejor liga del mundo.
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Fuera de los Hornets, ¿qué ofertas puede tener? Willy aspira a ese papel útil de segundo pívot, minutos limitados y realizar un notable impacto en ataque. La cuestión es cruzar los equipos que necesitarán segundo pívot y los que tienen un sistema que encaje con Willy en una NBA que tiende cada vez más a disminuir el tamaño e invertir en especialistas defensivos. Es imposible definir hoy el resultado, pero escasean los equipos que funcionan con un interior así.
También sería sorprendente que a los 26 años y un buen tramo final de temporada, Willy se quedase sin ofertas de la NBA. El caso es cuántos años, dinero y minutos le prometen. Hablamos de un jugador de 26 años que no tiene cotinuidad en los minutos desde la 2014-2015, cuando jugaba cedido en Sevilla.
Juancho sí que está en una posición muy ventajosa. Ya en su día gustó mucho en el Draft, subió más puestos de los esperados y los Nuggets se lanzaron a por él ante la posibilidad de perderle en favor de otros equipos como Boston. Es el jugador de complemento que se busca en la lía estos días: tiene el tamaño, la movilidad, el tiro exterior, la defensa, la lectura de juego y la capacidad de cortar sin balón.
Los Wolves reconstruyen su proyecto alrededor de Towns y Russell, que necesitarán tiradores de primer nivel para atacar el aro. Juancho ha cerrado ese tramo de 2019-2020 (14 partidos) como el tercer jugador en acierto en triples (42%) y el tercero en intentos por noche (4,9), quedándose Towns fuera por apenas disputar dos partidos por lesión.
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Rosas, presidente de los Timberwolves, habló con el equipo de NBA Global durante el All-Star de Chicago 2020 y definió al alero como "una adición muy importante". "Sentimos que puede jugar con Karl (Towns) de una manera muy estratégica, ofensiva y defensivamente. Valoramos mucho el espacio y la velocidad con la que jugamos, y él nos ayuda mucho de esa manera". Y no solo en febrero: Rosas reivindicó de nuevo este pasado mes de mayo la importancia de Juancho. "Queremos a estos chicos (Juancho y Beasley) en los Timberwolves por largo tiempo".
Es imposible especular sobre cifras del contrato. Esta temporada cuenta con diferentes condicionantes que harían bajar el límite salarial de las franquicias. Sin embargo, cuesta imaginar que Juancho tenga problemas para alcanzar un acuerdo por tres o cuatro temporadas y al menos una masa que ronde los 10 millones de dólares anuales. Como agente libre restringido, Juancho podría firmar por otro equipo y Minnesota tendría derecho a igualar la oferta. De no seguir las vías anteriores siempre queda firmar la qualifying offer ($4,642,800) para jugar un año más con los Wolves y ser agente libre en 2021.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.